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BARCELONA

Deulofeu vuelve al Barça con la mili hecha: 153 partidos

Es lo que jugó durante sus dos temporadas y media en el Everton, el año en el Sevilla, la media temporada en el Milán y sus apariciones internacionales.

Deulofeu, desolado después del partido.
Nils Petter Nilsson/OmbrelloGetty Images

Gerard Deulofeu, el primer fichaje oficial Barcelona, ya no es el niño que dejó Can Barça con 19 años, el Masia pata negra que llevaba en la burbuja desde los nueve años. Muchos futbolistas criados en la cantera del Barça admiten que, si no consiguen el sueño de llegar o asentarse en el primer equipo, salir es complicado. El Barça te forma y te educa con todas las comodidades y en un estilo de juego. En otros sitios puede haber otras comodidades, pero no las mismas. Puede haber otros estilos admirables de juego e igual de singulares, pero no concretamente del Barça.

Así que Deulofeu llega después de cuatro años, como si hubiese hecho un servicio militar de los de otra época. O como si se hubiera graduado viendo mundo en otras facultades: concretamente de Liverpool, Sevilla, Milán y Las Rozas. En sus cuatro años de ausencia en Can Barça. Gerard Deulofeu ha jugado 153 partidos con Everton, Sevilla, Milán, Selección Sub-21 y Absoluta, con la que incluso marcó su primer gol en Saint Denis ante Francia. En total, sumó 29 goles (8 en Goodison Park, 4 en San Siro, 3 en el Sánchez Pizjuán, 13 en la Sub-21 más el tanto con la Absoluta) y sumó hasta 45 asistencias. Destaca, aquí, su espectacular producción en el Everton en la temporada 2015-16.

Deulofeu no sólo ha conocido estadios. También entrenadores. Algunos que le han dado mimos, como Julen Lopetegui, que ha aprovechado su condición de especialista pero que tampoco ha tenido la oportunidad de convivir con él día a día. Ahí, varios técnicos que lo han tenido sus órdenes han echado de menos más concentración y actitud defensiva. Muchos expertos reprochan a Deulofeu excesivo individualismo, no sólo jugando, sino a la hora de vivir tácticamente los partidos. Vivir el partido desde el universo Deulofeu y no desde las exigencias globales del juego. Así lo explicaba Unai Emery en 2015. “Tiene unas cualidades increíbles, pero también tiene muchas carencias. Hacerle jugar con compañeros, en un campo grande, es complicado. Todavía no tiene la madurez o la capacidad de sacrificio. Yo le he dicho: hay otros jugadores como Iborra, Carriço o Vitolo que aspiran a un contrato como el tuyo, chicos que tienen menos talento pero más hambre. Ellos saben lo que cuesta llegar hasta aquí. Cuando tenga la experiencia, él crecerá y espero que entienda lo que le dije. Si no es aquí, será en otro lado". Luis Enrique tampoco le dio la oportunidad a su llegada en 2014: “Deulofeu es muy ofensivo, pero tiene que mejorar mucho en defensa”. Hasta su último técnico, Vincenzo Montella en el Milán, le ha puesto en alerta: “Tiene que centrarse más en lo colectivo”. Eso sí, el ex jugador de la Roma reconoce que “potencialmente es una estrella”. También lo piensa Roberto Martínez. “Estoy convencido de que será un crack mundial”, dijo del futbolista de Riudarenes en 2014.

Deulofeu, ángel y demonio, no deja indiferente a nadie. Pero hubiera resultado del todo sorprendente que el Barça hubiese dejado marchar a un futbolista casi nacido y criado en la cantera. Todo por el precio ridículo en el mercado.