Richie Porte se exhibe y sigue firme como líder del Dauphiné
El líder australiano no sólo se defendió de los ataques, sino que dejó a los favoritos en la llegada al Alpe D'Huez donde ganó Kennaugh. Contador llegó por delante de Froome.
Richie Porte es más líder del Dauphiné después de que se volviera a mostrar como el ciclista más fuerte de la carrera. Sólo Bardet desde lejos le pudo recuperar tiempo, porque nadie más fue capaz de dejarle de rueda. Aru lo intentó, pero acabó sucumbiendo, como también hicieron el resto de favoritos como Froome o Valverde cuando aceleró el del BMC. Alberto Contador, que sí pudo responder en un primer momento, pareció recuperar sensaciones (llegó a 8" del maillot amarillo), mientras que el danés Fuglsang, ganador el viernes, sí cruzó la meta a su estela.
Esa fue la lucha por la general, porque la de la etapa se dio entre un grupo de 17 corredores (con los españoles Delio Fernández y un Jesús Herrada que acabó tercero de la etapa). Peter Kennaugh (Sky) se llevó la victoria en la llegada al Alpe D'Huez (en una versión de 3,7 km bastante más light que la clásica).
Ni Valverde, que intentó acelerar en la cima de Sarenne, ni Aru o Chaves, ya en el Alpe D'Huez, le inquietaron. Sólo provocaron su feroz respuesta, un acelerón tremendo que, esta vez sí, respondió Contador, muy tapado durante la jornada ("vi a Porte muy fuerte y preferí guardar"), y Fuglsang. Aunque el de Pinto se descolgó en los últimos metros (llegó a 8" de Porte), sí le permitió hacerlo mejor que Aru (a 17"), Valverde y Froome (ambos a 23").
Este domingo, etapa final con más dureza (cuatro puertos con final en el Plateau de Solaison, de categoría especial), que kilómetros (115). La última oportunidad para desbancar a Porte, o la última del australiano para seguir metiendo miedo de cara al Tour de Francia (1 de julio).