La Vinotinto hace historia
Un gol del capitán Yángel Herrera en el 108' frente a una combativa Japón clasifica a la selección venezolana a los cuartos de final por primera vez en su historia .
La Vinotinto Sub-20 de Rafael Dudamel ya ha hecho historia. Tras un sufrido partido frente a una Japón que nunca bajó los brazos, Venezuela firmó el pase a los cuartos de final por primera vez en su historia gracias a un tanto de Yángel Herrera en la prórroga y ya espera rival en este Mundial Sub-20 en el que parece que acabarán llegando muy lejos.
Venezuela sufrió pero lo que parecía estar convirtiéndose en pesadilla acabó siendo épica y el culpable fue Yángel Herrera. No podía ser otro. En un Mundial en el que el capitán vinotinto no estaba mostrando su mejor nivel, cabeceó un centro de Lucena –el mediocentro tiene un guante en su pie derecho- y desató el delirio en el banquillo de Rafael Dudamel. El técnico ya empezaba a despertar las primeras críticas por su pasividad a la hora de hacer cambios: el primero lo hizo en el minuto 97 pero al final le salió bien.
El partido empezó con la Vinotinto convencida de hacer daño a los nipones. Peñaranda dio el primer aviso con una jugada fantástica partiendo desde la izquierda que acabó en el lateral de la red después de zafarse con un túnel de un defensor japonés. Poco más se vio del jugador teñido. El ‘7’ estuvo excesivamente individualista, ralentizando el juego venezolano, y acabó siendo sustituido.
Venezuela fue de más a menos en la primera parte y fue consciente de que Japón también tenía armas que podían tumbarles tras un zurdazo de Doan al travesaño, que cortó de golpe la respiración de media Venezuela. El mejor jugador japonés, eso sí, no estuvo a su nivel. En la segunda parte se calcó lo sucedido en la primera: la Vinotinto salió mejor pero el paso de los minutos y el cansancio fue atenazando las piernas de los venezolanos. Asomaba la prórroga y Japón movía el banquillo. Esa frescura les permitió acabar mejor los noventa minutos ante una Venezuela en la que destacó en todo momento Soteldo. Es un jugador especial, distinto, y lo demuestra a cada balón que pasa por sus botas.
Con el fin del tiempo reglamentario se llegó a una prórroga en la que, por encima de todo, ninguno quería perder. Los nervios se hicieron dueños del partido y entonces llegó la jugada que quedará en las retinas del fútbol vinotinto. Lucena sacó un córner al corazón del área y Yángel Herrera se elevó por encima de la zaga nipona para sacar un testarazo que entró pegado al poste. El capitán escribía su nombre en los libros de historia y era engullido por el banquillo venezolano, que se lanzó en bloque sobre él.
Venezuela supera así su techo en cualquier Mundial, fijado hasta hoy en los octavos de final que logró en el Sub-20 que se disputó en Egipto en 2009, cuando cayó frente a Emiratos Árabes Unidos, y ya espera rival en los cuartos de final. Este saldrá del Estados Unidos-Nueva Zelanda que se jugará el día 1, por lo que los de Dudamel tendrán dos días más de descanso.