AUTOMOVILISMO | LA INTRAHISTORIA
Alonso prueba un Indycar, como lo hizo Senna hace 25 años
El asturiano tiene su primer test con el coche con el que correrá la Indy 500 y el tricampeón brasileño lo hizo con un Penske en 1992.
Hoy es el día. Fernando Alonso se pondrá por primera vez al volante del McLaren Honda Andretti de la Indycar con el que disputará la Indy 500 el próximo 28 de mayo. Su ídolo y referente también hizo un test hace 25 años.
Terminaba 1992 y Ayrton Senna estaba enfadado. Con la F-1 y la FIA que amenazaba con retirarle la Superlicencia, con McLaren que había cambiado los motores Honda por Ford para el año siguiente, con la superioridad de Williams Renault... Y decidió realizar una maniobra de aviso o quizá simplemente quiso probar. Organizó a través de Marlboro un test con un CART IndyCar World Series del Team Penske y con el único acompañamiento de un cicerone de lujo, Emerson Fittipaldi, piloto por entonces del equipo norteamericano, y de un representante de la firma de tabaco, John Hogan, se presentó en el Firebird Raceway de Phoenix.
Test privado y secreto que se hizo público poco después, con vídeo incluido, en el que Nigel Beresford, actual director técnico de Dragon Racing en Fórmula E, fue el ingeniero de Senna esa jornada. "Verlo en este pequeño circuito perdido en el medio de la nada en el desierto, en este entorno aislado, fue realmente surrealista", relataba Beresford a 'motorsport.com'.
¿Y qué pasó? Fittipaldi se puso primero al volante. Tras 25 vueltas logró un mejor crono de 49.700. Llegó el turno del genio de Sao Paulo y después de 24 vueltas logró parar el tiempo en... 49.090. Más de medio segundo mejor que Fittipaldi, con nueve años de experiencia al volante de ese monoplaza y ya ganador del campeonato y de la Indy 500 en 1989.
"Este coche de Indycar tenía una caja de cambios secuencial y Senna tuvo que acostumbrarse a cambiar de marcha manualmente con su mano derecha. A veces no sabía en qué marcha iba. Paraba el coche, ponía la primera marcha, y seguía de nuevo", revela Beresford, que concluye: "Volvió a boxes y dijo: 'Muchas gracias, comprobé lo que necesitaba saber'. Se desabrochó el cinturón, y salió del coche. Había terminado. Fue increíblemente rápido y para mí, fue una muestra de lo extraordinariamente rápido que podría adaptarse a un nuevo entorno y ser competitivo".