Como cabía esperar, en el partido entre Athletic y Real Madrid, que se saldó con tres puntos para los blancos, no faltaron los roces y la tensión: cada balón dividido era una choque de trenes. Esto, unido a lo acumulado durante la temporada, dejó la peculiar imagen del estado de los pies de Bale tras el encuentro.
Las 'herramientas' del galés aparecen con varios dedos vendados en la foto en el vestuario del Nuevo San Mamés subida por algunos jugadores madridistas para compartir la alegría de la victoria en las redes sociales con la afición. Gareth aparece, además, con bolsas de hielo en cada tobillo.