Julián Téllez: "Con Millos tuve presión durante seis meses"
El ex jugador de América y Millonarios recuerda esos momentos que marcaron su carrera profesional aportando para estos dos históricos.
AS Colombia conversó con Julián 'Matador' Téllez, delantero que jugó a finales de los años noventa y principio de siglo con América y Millonarios, revivió sus días como jugador en el que destacó el aprecio que le tuvieron los hinchas escarlatas desde muy joven y los duros momentos que vivió durante seis primeros meses jugando para Millonarios.
¿Qué recuerdos tiene de los enfrentamientos Millos-América?
“Tuve la oportunidad de jugar un año con Millonarios así que el enfrentamiento con el azul fue muy poco. Sin embargo, cuando enfrenté a Millonarios con la camiseta de América fue siempre un clásico. Fue época donde El Campín comenzó a verse lleno con hinchas visitantes”.
¿Con qué equipo jugaba con más presión?
“Con América nunca sentí presión desde que llegué porque poco a poco me fui ganando el cariño de la gente. Con Millonarios tuve presión durante seis meses porque la gente me referenció como un ídolo de América y la rivalidad de las hinchadas hizo que el aficionado de Millos no esperaba nada de mi rendimiento”.
“Fueron momentos muy duros pero poco a poco convencí al hincha azul con mi futbol, con los goles que hice y terminé convirtiéndome en el goleador del equipo gracias ello”.
¿Qué anécdotas recuerda jugando para los dos equipos?
“Cuando tenía 19 años y llegué al Campín portando la camiseta de América la mitad del estadio empezó a corear mi nombre porque estaba en el banco de suplentes y el equipo estaba perdiendo. Esa fue una anécdota muy bonita porque estaba muy joven y el reconocimiento del hincha americano en estadio visitante se hizo sentir”.
“Con Millonarios tuve la grata fortuna de cambiarle el pensamiento al hincha. El aficionado azul me criticaba, me insultaba y a los dos meses después de una seguidilla de goles que se transformaron en puntos para el equipo hizo que esos mismos hinchas coreaban mi nombre y a tener un vínculo muy afectivo por mi parte. A los dos meses ya no había rencor y todos los goles que hacia iba y los cantaba junto a la tribuna”.
¿Cree que limitar el ingreso del hincha visitante le resta valor al espectáculo del fútbol?
Totalmente. Es lindo ver siempre cuando dos hinchadas apoyan lealmente a su equipo, pero lamentablemente hoy la violencia ha acabado con el espectáculo. Ojalá en algún momento las leyes de este país castiguen severamente a los pocos violentos que van a los estadio que dañen el fútbol”.