Alex Escobar: “Hasta yo quería meterme a jugar contra el Cali”
El DT de Orsomarso, habló de las virtudes que le permitieron vencer al Cali. el 2-1 en Palmira, fue el detonante para la desvinculación de Mario Yepes como DT de los ‘azucareros’.
Curtido Alex Escobar de filtrar balones y desajustar defensas rivales, analizó la rocosa defensa del Deportivo Cali, miró su banco de suplentes y como un padre a un hijo le transmitió tanta confianza a un chico de 18 años, al punto que lo hizo actuar con efectiva rebeldía. José Enamorado es el nombre del citado mediocampista creativo. “Lo metí a los 12 minutos del segundo tiempo, le dije, ‘encare y demelo que usted es muy bueno’. Gracias a Dios hizo el gol del empate y al final ganamos”, comentó ‘el Pibe del barrio Obrero’ sobre uno de sus movimientos desde la orientación táctica, que le permitió imponerse a los ‘azucareros’ el miércoles en Palmira, por la fecha 1 de la Copa Águila. Cerca de 18 horas después, el batacazo generó la desvinculación de Mario Alberto Yepes de la dirección técnica de los verdiblancos.
Escobar, en su primera experiencia como entrenador en propiedad, dirigiendo Orsomarso, se mantiene fiel a la calidad que expresó como futbolista. Atrofiada la lírica en la actualidad, y con la practicidad como prioridad, el legendario exfutbolista del América, desea no dejar marchitar la estética.
“El dar ‘melo’ es la palabra que no se puede salir de la historia del fútbol. Esos jugadores como Enamorado, que eluden con la cintura, hay que darles confianza. Yo me reía y decía, ‘este es un fenómeno’. es un Neymar, guardando las proporciones, va a ser un crack. Lo metí tras la rudeza de los defensas del Cali”, amplió el del barrio Obrero.
¿Y cómo hizo para que sus jugadores no tuvieran complejos de inferioridad?
“Les quité la presión y la cargué yo. Tengo una espalda ancha. Gracias a Dios tenemos mucha experiencia, nos hemos preparado a conciencia, con fe en Dios. No hice charla técnica, solo trabajé la pelota parada, porque trabajo durante toda la semana fieles a nuestra idea y con relación a la propuesta del rival. Sabía que el partido iba a ser complicado, pero creía mucho en estos muchachos, algunos de 17 y 18 años. Les dije que jugaran como siempre lo hacían, que era un marco lindo y que hasta yo quería meterme a jugar contra el Cali”.
¿Dónde le vio la debilidad al Cali?
“En la defensa. Los atacamos por los laterales, les hicimos superioridad numérica, puse jugadores muy rápidos y con buena técnica como Michael López y Edward López. Además, tengo dos mediocentros que van a ser grandes jugadores, Fierro y González, juegan demasiado”.
¿Cómo los mantiene motivados?
“El que no juega como el que juega son importantes. A todos los trato igual, y cuando les doy la oportunidad de jugar, se revientan. Este grupo trabaja en equipo. En el camerino siempre estamos todos. Este es un grupo humilde, con deseos de salir adelante. Fue muy lindo el partido frente al Cali y lo que venimos haciendo con Orsomarso”.