Cúper pudo con Renard y Egipto se clasifica para semifinales

Egipto parece que ha vuelto, y para quedarse. Al menos por lo que está demostrando en esta Copa de África. El equipo más laureado del continente (siete títulos) se clasificó para las semifinales del torneo africano después de vencer de manera agónica a Marruecos. Un gol de Kahraba en el tramo final del choque, que además hacía su primer tanto con los Faraones, fue suficiente, aunque los marroquíes merecieron mejor suerte. Héctor Cúper pudo con Hervé Renard en el duelo de banquillos...

El fútbol tiene estas cosas. Marruecos fue mejor, lo intentó más y se mostró más ofensivo que un organizado Egipto, pero terminó eliminado. Porque a los marroquíes les faltó el gol, sobre todo cuando los laterales ganaban línea de fondo buscando el área. Por tramos, fue mucho mejor que unos Faraones que arriesgaron lo justo. Vaya, lo mínimo. Y más con Héctor Cúper en el banquillo. Los números lo dicen todo. Con el argentino al mando, cuatro partidos en Copa de África con tres victorias (las tres por 1-0) y un empate. Y, lo más importante, no ha encajado todavía un tanto en lo que llevamos de torneo. Casi nada. Claro que viendo su planteamiento, no es de extrañar. Con cinco jugadores en tareas defensivas constantemente, no dejó contragolpear a una Marruecos que lo intentó por las bandas pero, como contamos, sin suerte en el remate.

Arrancó el partido con Trezeguet (buen nombre, no tanto sus habilidades) dando el primer susto a Munir. Pero el portero de Marruecos (que milita en el Numancia) quería seguir más tiempo en África. Despejó el disparo del egipcio y comenzó su exhibición. Después sacó una espectacular mano a Salah, estrella de los Faraones que no tuvo su mejor encuentro, y más tarde volvió a cruzarse en el camino del jugador del Roma para salvar a los suyos tras una buena jugada de estrategia. No pudo hacerlo cuando el choque agonizaba, en una jugada de mala suerte para Marruecos y buena para Egipto. Córner a favor de los de Cúper que terminó metiendo para dentro Kahraba tras varios rechaces. Munir no se lo creía después del partidazo que se había marcado. Marruecos estaba eliminado y Egipto volvía a estar entre los grandes. Llevaba tres ediciones sin participar en la Copa de África y ahora está más cerca de su octavo título. Con Cúper en el banquillo, seguridad y orden tendrá seguro, pero necesitará de la mejor versión de Salah ante Burkina Faso para soñar con la final. Cúper pudo en el duelo de banquillos con Renard, quizás el entrenador que más y mejor conoce el fútbol del continente tras haber conquistado el título con Zambia y Costa de Marfil. Marruecos mereció más, pero sin gol es complicado y Egipto, muy ordenado en tareas defensivas, pasa a semifinales sin encajar un gol.