Fútbol
Hugo Rodallega: “Me pone triste no estar la Selección”
El delantero habló en exclusiva con AS Colombia luego de firmar con el Trabzonspor de Turquía. “Me pone triste no estar en la Selección, pudiendo estar”, reconoció.
Firma con Monterrey, con Atlas, con Necaxa. Tiquete al ‘viejo continente’, aterrizaje en Inglaterra y firma con Wigan, luego con Fulham. Nueva mudanza de país, y firma en Turquía con Akhisar. En la presente semana lo hizo con Trabzonspor. Ya suma 11 temporadas cruzando las fronteras. Adaptado a diferentes culturas, renovado tras cada temporada, con 31 años, se mantiene en la élite. Hugo Andrés Rodallega Martínez ha refrendado ser fuerte de mente. Ni la muerte de su padre (31 de julio de 2015), quien iluminó su andar, lo derrumbó.
“Hablo con él todos los días. De corazón y de alma, lo voy a tener siempre presente. Mi viejo fue el creador de Hugo Rodallega. Mi viejo nunca va a desaparecer, siempre trato de tenerlo presente. Mi papá luchó contra la corriente y al final conseguimos el objetivo de que yo fuera futbolista profesional, que era un sueño para él”, comentó el delantero de El Carmelo, Valle.
¿Tuvo un pálpito diferente en esta nueva presentación?
Ya la experiencia me ha brindado la oportunidad de saber manejar este tipo de situaciones, pero por supuesto que en cada una de ellas se siente algo diferente, y ahora no fue la excepción. El día que firmé el contrato y me puse la camiseta, sentí una emoción muy grande. Además, porque Trabzonspor es un equipo con mucha historia, que ha ganado siete veces la Liga de Turquía y ha participado en las Ligas de Europa. Eso me hace sentir mucho orgullo.
Con 31 años y firma un nuevo contrato en Europa, está lejos de volver a Colombia…
Yo mismo me sorprendo. Con 31 años, uno podría estar pensando en regresar a Colombia o a algún país de Latinoamérica, pero fortuna mi nivel no ha decaído. Me siento muy fuerte, lo demostré en la temporada anterior marcando 25 goles con un equipo muy pequeño y eso despertó el interés de los equipos grandes de Turquía. Me hace sentir orgulloso y con deseos de ir para adelante y buscar más objetivos.
¿Era su deseo continuar en la Liga turca?
Sí. Estoy agradecido con este país. Me han brindado su cariño. Donde quiera que voy, la gente me reconoce y me admira mucho, por eso le dije a mi representante que la prioridad era mantenerme en Turquía.
¿Cuál es la cultura que lo ha marcado?
Por fortuna no he tenido problemas con la adaptación. Me ha ido muy bien en la relación con la gente turca y sus costumbres. He estado varios años en México, en Inglaterra y ahora en Turquía, pero en realidad, me marcó muchísimo Inglaterra, porque es otro nivel. Me dejó muchas enseñanzas, además, dos de mis hijos nacieron allá.
Ahora en un equipo de más relieve, ¿se ha trazado una meta para este año?
Desde hace tres días que llegué acá, dije que era un nuevo comienzo. Ya marqué una historia en un equipo más pequeño como Akhisar. Ahora Trabzonspor tiene más afición en todo el país y eso genera más responsabilidad, pero en realidad, no suelo trazarme metas. Trato de marcar la mayor cantidad de goles posibles. El objetivo es ayudar en lo que más pueda a mi equipo.
Supongo que con Fabián Castillo le pondrán salsa a la delantera del Trabzonspor…
Ya empezamos a ponerle salsa. Ya estamos adaptando a todos los compañeros a nuestros ritmos y costumbres. Sin embargo, en el fútbol no necesitas tener un compañero de tu misma nacionalidad, porque el fútbol es un idioma universal. En Akhisar no tuve ningún paisano y me entendí muy bien con ellos, dentro y fuera de la cancha, pero ahora con mucha más razón, queremos marcar historia aquí con Fabián.
Si Dios quiere, el domingo que vamos a jugar nuestro primer partido juntos, si hacemos gol, tenemos ya una celebración preparada (…) Yo le meto a todo lo que tenga que ver son salsa, timba, bolero, son montuno, soy ciento por ciento salsero. Los turcos intentan moverse, pero es difícil.
¿Con cuál delantero ha tenido más entendimiento?
He jugado con muchos delanteros, pero el que me marcó y mantengo como referente en la dupla es Blas Pérez, con quien compartí en el Deportivo Cali en 2005. Me enseñó mucho, porque era guerrero, luchador, peleaba con todos los defensas y eso me facilitó mucho el juego. Él era el cazador de área y yo tenía más espacio para moverme y combinar con Ciciliano y ‘Caracho’ Domínguez.
¿Lo aflige no estar en la Selección Colombia?
Soy un hombre que me preparo futbolística y mentalmente para todo tipo de situaciones. Sé que en el fútbol uno gana, pierde y empata, y en el caso de la Selección, Pékerman y sus acompañantes son quienes deciden quién viste la camiseta de la tricolor.
Yo simplemente hago mi trabajo con el equipo que esté. La temporada pasada fui uno de los colombianos que más goles hizo en Europa, y eso hizo que mi nombre sonara mucho, pero si el técnico de la Selección decide que no estoy para hacer parte de ella, lo respeto. Me pone triste no estar en la Selección, pudiendo estar, pero son decisiones que tengo que respetar.
¿Cómo hace para tener tanta fortaleza mental?
Mi familia me da muchísima fortaleza ante cualquier situación que me pueda desestabilizar. Y además, sigo a los mejores, vivo pendiente de los movimientos de Cristiano Ronaldo y de Messi. Me gusta ver videos de ellos.
¿Con cuál de esos ‘extraterrestres’ ha tenido mayor acercamiento?
Con ambos. A Messi lo enfrenté en varios partidos de Eliminatorias y con Cristiano Ronaldo tengo un lindo recuerdo. Jugamos Wigan contra Manchester United; era el partido del título para ellos y yo marqué gol. Después del partido, conversamos un rato en el túnel, cambiamos la camiseta. He tenido la fortuna de estar cerca de esos dos ‘animales’”.
¿Por qué nunca lo desbordó el protagonismo mediático?
Mi familia tuvo mucho que ver. Me criaron con mucha humildad, muy centrado. Mi padre fue un hombre muy luchador y yo valoro muchísimo eso, al igual que mi madre y mis hermanas. Luego, junto a mi esposa y mis hijos, tratamos de mantenernos unidos. Somos personas amables y entregadas a Dios. Hoy en día, pese a que mi nombre puede ser un ejemplo para muchos niños y personas en el mundo, trato de no perder el rumbo. Vivo siempre agradecido con Dios por mantenerme con los pies firmes en la tierra.