Caracol Radio
NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Zidane duda dónde colocar a Cristiano

En la comparecencia de ayer ante la prensa, Zidane vino a decir que el puesto natural de Cristiano está en la banda, que prefiere jugar ahí y que volverá ahí. Supongo que desde hoy. El otro día jugó ‘de nueve’ y no resultó. Por otra parte, el Madrid tiene muy cubierta esa posición en la plantilla, con Benzema, Morata y Mariano. Ante esa perspectiva, poner a Cristiano como ‘nueve’ (y el primero de ellos, Cristiano no es concebible de otra manera) crearía un tapón ahí. Zidane está en todo caso ante un problema a la hora de administrar la pérdida de poderío físico de Cristiano, que empieza a ser evidente. Ya no se va tan fácilmente como antes.

A mí me parecía una buena solución la de delantero centro. Es un ‘hábitat’ al que tendría que adaptarse, pero es inteligente en su juego y constante cuando se propone algo. Podría conseguirlo. En su puesto anterior, en la banda izquierda, va a ir a peor por esa acusada pérdida de velocidad. Hagan una prueba: pónganse un partido de hace cinco años y comparen. Verán un vendaval incontenible, algo que ya no es. Como delantero centro podría ser cada vez mejor, gastaría menos energía, luciría más su cabezazo y tendría el cañón listo siempre dentro del área. Necesitaría, eso sí, revivir aquel regate corto que en sus inicios tuvo. Puede hacerlo.

Otra preocupación de Zidane, se vio en la conferencia de prensa, es Danilo. El Bernabéu le pitó el otro día. Zidane quiso desviar tramposillamente el asunto hacia la prensa. Pero las críticas de la prensa las sobrellevan mejor los futbolistas que el murmullo desconfiado del público propio. Eso es lo que les quita la confianza para jugar bien, y sin eso el jugador no es nada. El problema de Danilo fue su fichaje, que la afición consideró disparatado. Costó 31,5 millones y venía a pisarle el puesto al único canterano, Carvajal, que asomaba la cabeza en muchísimos años. Lo tenía difícil. Y como luego con su juego no lo justificó, pasa lo que pasa.