Gabón, una Copa de África con 18 ‘españoles’
La Copa de África vuelve y por vez primera en la historia habrá un técnico español. Camacho dirigirá a la anfitriona Gabón. Un verdadero desafío.
EI fútbol se ha convertido en algo tan global que es capaz de conectar Cieza con Libreville. La Copa de África tiende ese puente imaginario de 4.355 kilómetros entre la hermosa región de Murcia y la más desconocida de Gabón. José Antonio Camacho tiene la culpa. El ciezano debuta esta tarde como seleccionador gabonés en un torneo que por primera vez verá a un técnico español en sus banquillos. No en cualquier banquillo, además.
Gabón es la anfitriona de una cita que discurrirá por cuatro de sus estadios desde el partido inaugural de hoy hasta la final del 5 de febrero. El fuego lo abren los de Camacho ante Guinea Bissau. La antigua colonia portuguesa es uno de los países más pequeños de África (apenas 1,7 millones de habitantes) y debuta en el torneo, lo que se puede considerar un caramelo con el que abrir boca para los Aubameyang y compañía. Tampoco Burkina Faso y una Camerún venida a menos son excesiva amenaza para alcanzar el pase a cuartos, lo mínimo exigible para Camacho pese a llevar apenas mes y medio en el cargo.
Quizá sea fuera del estadio donde encuentren los gaboneses más problemas, en este caso políticos. Los opositores a Ali Bongo, presidente del país, ya han anunciado su intención de boicotear el torneo al considerar ilegal la última reelección del dirigente, que hoy estará en el palco presidiendo tan importante encuentro. Al menos el boicot se anuncia con intenciones pacíficas.
Renovación. Pero Camacho no será lo único que suene a español en la Copa de África. Hasta 18 jugadores que militan en nuestro país disputarán el torneo desperdigados por las diferentes selecciones. Marruecos, con cinco, es la que más aporta: Munir (Numancia), Bono (Girona), Fajr (Deportivo), Carcela González (Granada) y En Nesiry (Málaga). Se intuye que puedan tener un papel importante Bakambu (Villarreal) con la RD Congo, Diop (Espanyol) con Senegal o Abdennour (Valencia) con Túnez. Especialmente curioso es lo de Pape Massa Mbaye, entrenador de porteros en el Polideportivo Aguadulce, en Roquetas de Mar, y a la vez internacional con Guinea Bissau, a la que escogió antes que a Senegal, su país, para poder disputar una Copa de África. En ella está.
La actual edición también supone un relevo generacional evidente en África. Ya no están los Etoo, Drogba, Yayá Touré o Seydou Keita, por lo que el protagonismo debe recaer en otras estrellas más jóvenes como Mané, Zaha, Mahrez o Salah. Eso y la presencia de selecciones poco frecuentes como Guinea Bissau, Zimbabue o Uganda le da un toque de preciosa imprevisibilidad a una competición ya de por sí imprevisible. Fútbol casi virgen. Fútbol africano. Con Camacho por ahí, eso sí.