Medellín sentencia a Chicó y clasifica a segunda ronda
Un juego de infarto se vivió en el Atanasio Girardot en la penúltima fecha de la Liga II-2016. Pasó de todo. Goles, expulsiones, penales fallados, clasificación de Independiente Medellín y el descenso de Boyacá Chicó. 90 minutos vibrantes que marcaron mucho del futuro del FPC.
Los ajedrezados, que cayeron 3-2 con el Rojo, vinieron a jugarse la vida. Y de entrada no le plantearon un choque fácil al local, que por momentos se vio maniatado con el orden táctico del rival y vulnerable cuando Misael Riascos se atrevía a pisar el área.
Un gol de Andrés Correa (20') le complicó aún más el panorama al DIM. Lo había intentado con Juan Fernando Caicedo y Luis Carlos Arias, pero la buena noche del portero uruguayo Rafael García frustró las aspiraciones de los dirigidos por Leonel Álvarez.
La falta de profundidad del Rojo, en parte por el buen trabajo del visitante, lo llevó a buscar en la media distancia el empate. Lo intentó con Dídier Moreno, pero fue Juan David Cabezas el que sorprendió con un remate a unos 30 metros. Nada pudo hacer García para evitar el 1-1 con el golazo (30') del vallecaucano que volvió a la vida al campeón.
El primer tiempo terminó parejo en todo. Ya en la reanudación las mejores opciones fueron para el 'Poderoso' mientras que el conjunto de Tunja tenía el oído en el duelo entre Pasto y Fortaleza que determinaría gran parte de su futuro en el tema del descenso.
Como Medellín tenía su propia lucha, con ímpetu buscó el tanto de la victoria para firma su avance a los play-offs. No se le dio porque se le atravesó el arquero García con sus atajadas a Lucho Arias en dos oportunidades, a Mauricio Cortés y a Caicedo.
Pero fue en un penal el que le abrió la puerta del triunfo y de la clasificación. No obstante, García se lo atajó a Marrugo para poner más suspenso y mucho drama, pues minutos después fue sancionado un penal en favor, que Riascos no falló ante David González para poner el duelo 1-2 en suelo paisa (60').
La historia no acabó ahí. Había un partido entero por jugar. En el campo nadie se entregó. Y aunque el resultado en Pasto condenaba al ajedrezado a perder la categoría, no se la puso fácil a DIM, que jugó con la jerarquía del campeón e inclinó la cancha para ganarse el derecho a defender el título.
Colección opciones en el remate. En unas faltó puntería. En otras se estrelló con García. Pero con la entrada de Mao Molina que empezó a tener más claridad. Y fue en un zurdazo del ídolo que Marrugo pudo desviar para poner el 2-2 e ilusionar a toda la tribuna (83'), pues además el rival jugaba con uno menos.
Ya en tiempo de reposición pasó de todo. Tuvo el tanto de la victoria por todas las vías, pero llegó desde el punto penal para darle una revancha instantánea a Marrugo, quien se reivindicó con su cobro para sellar el triunfo que puso al Poderoso en las finales de la Liga con sus 33 puntos.
En Chicó, que llegó en el 2003 a la primera división y ganó su única estrella en 2008, todo fue desilusión. Perdió con las botas puestas la categoría. Era la crónica de una muerte anunciada porque Pasto hizo su tarea y al frente tuvo a un campeón ávido de refrendar su estrella.
En la próxima fecha Medellín visitará a Millonarios con la tranquilidad de tener su boleto para la liguilla.
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