GRUPO H | D.ZAGREB 0 - JUVENTUS 4
La Juventus golea en Zagreb con un Pjanic excepcional
El mediocentro hizo el primer gol y dio la asistencia a Higuaín en el segundo. Los demás goles fueron de Dybala y de Semper en propia puerta.
Para la Juventus llegó el esperado golpe sobre la mesa: los bianconeri pasearon en el Maksimir arrollando al Dinamo Zagreb 4-0, en un partido que tuvo poca historia. El decepcionante empate con el Sevilla, la derrota en el derbi de Italia con el Inter y la fea actuación de Palermo quedó borradas gracias a una victoria que era obligatoria y esperada, pero que llegó casi con más facilidad de lo que se esperaba.
La Vecchia Signora se hizo con el control del balón básicamente desde el minuto uno, y con tranquilidad esperó la ocasión para hacer daño, consciente que solo era cuestión de tiempo para que llegara. Tardó 24 minutos: tras un pase largo de Bonucci (cada vez más 'regista' y menos defensa central), Sigali y Schildenfeld se estorbaron entregando el esférico a Pjanic, que con un toque delicado infló la red.
El mismo bosnio, en el 31', le sirvió en bandeja de plata a Gonzalo Higuaín el balón para el 2-0, con un pase largo que el Pipita controló con el pecho antes de empujar entre palos con la zurda. Fue el primer tanto de Champions con los bianconeri del exmadridista, que no marcaba fuera de casa en la máxima competición continental desde hace cinco años.
En el descanso se manifestó el único lunar de la perfecta noche de los de Turín, ya mermados por las lesiones en el mediocampo: tras su gran actuación, Pjanic no participó a la segunda mitad debido al dolor por un golpe en la pierna. Allegri, que en esta semana se quedó sin Asamoah, quiso evitar riesgos y sacó a Cuadrado.
La reanudación sirvió para tres cosas, y bien bonitas. La primera fue el golazo de Paulo Dybala en el 57': la Joya sacó de la chistera un imparable latigazo zurdo desde casi 25 metros, acabando con su sequía en esta temporada. Luego, Allegri lanzó a los exídolos de la casa, Pjaca y Mandžukic, ambos ovacionados. Cinco minutos antes del pitido final, además, un lanzamiento de falta de Dani Alves fue desviado por la barrera y por el meta local, Semper, antes de colarse en la portería. Fue la guinda del pastel para la Juve, que ahora comparte el liderato de su grupo con el Sevilla: la clasificación está un poquito más cerca, aunque para quedar primeros y cancelar el traspié con los andaluces de la primera jornada, todavía hará falta mucho esfuerzo.