Rosberg gana el GP de Italia y está a dos puntos de Hamilton
Victoria del alemán que se pone a dos puntos de Hamilton que fue segundo con Vettel que también estuvo el podio en el tercer lugar.
‘Dale, dale’. ¿Saben ese guardia de tráfico que te da paso cuando el semáforo está en rojo y tu has parado? ‘Dale, dale’. Y al final, claro, le das. Y pasas. Porque siempre el hombre está por encima de la máquina. Y si el guardia lo dice… ¿Saben, verdad? Pues bien, eso es lo que le pasó a Fernando Alonso en Monza. Era la vuelta trece, no podía ser de otra manera, y el asturiano entró en boxes a cambiar sus neumáticos superblandos por unos blandos, los mecánicos terminaron de sustituir sus compuestos pero entonces el semáforo seguía en rojo y Alonso parado, sin salir, hasta que el mecánico le señala que ya puede salir. ‘Dale, dale’. Y entonces sí, sale, pero la historia le cuesta que su parada en boxes sea de cinco segundos y medio. Por ejemplo Verstappen paró a la vez con el Red Bull y tardó 2,6. Ahí acabó la carrera del asturiano que antes había hecho una salida espectacular del duodécimo al noveno que ocupaba en la segunda vuelta. En estos momentos su compañero Button, que partía decimocuarto, era decimonoveno. Diez puestos de diferencia. Pero entre la parada y la estrategia lo cierto es que a diez vueltas del final el británico adelantaba al español para arrebatarle la duodécima plaza. Problemas de neumáticos, de entrega de potencia, pit stop y varios más a elegir hicieron que finalmente Alonso, que llegó a lograr el milagro de los puntos, terminó decimocuarto, dos puestos más allá del que salía. Pero con un momento de diversión. Vuelta rápida a dos del final, con neumáticos superblandos nuevos. Desde Abu Dhabi 2013 no lo lograba. Optimismo de mentira, un engaño para la esperanza. ‘Dale, dale’.
Eso se lo podrían haber dicho también a Lewis Hamilton en la salida, quizá para despertarle, porque el inglés se despistó y ese instante le costó la victoria. Se quedó sexto y tuvo que remontar hasta la segunda posición. Por detrás siempre de Nico Rosberg, nueva victoria para el alemán que se acerca a dos puntos de su compañero. Buena carrera del hijo de Keke, sin errores, tranquilo y séptimo triunfo, segundo consecutivo para el germano.
Tras los dos Mercedes, nuevo doblete, gracias a un ritmo demoledor y una estrategia a solo una parada, el Ferrari de Sebastian Vettel que lo intentó todo, incluso una estrategia a dos paradas para ir más rápido, neumáticos con más agarre, intento de pasar a Nico en la segunda curva… pero nada. Tercero Seb. Y cuarto Kimi Raikkonen, al que pararon en algún momento en su intención de plantar batalla al tetracampeón. Entre los Red Bull, Ricciardo por delante de Verstappen otra vez y Bottas de Masa en los Williams y Pérez de Hulkenberg en Force India, los equipos que puntuaron en este circuito de velocidad pura.
Puestos que son ahora una utopía para Carlos Sainz, decimoquinto el madrileño, por detrás de Alonso, con una extraña estrategia en la que parecía que iría a una parada y finalmente fue a dos. No le sirvió de nada con un motor que no corre. Nada. En Singapur promete batalla, diversión y dejarse la piel. Seguro. Como Alonso. Y Hamilton que buscará venganza. Se acabó Monza este año, los tifossi terminaron con media sonrisa en la recta de meta agitando la bandera del cavallino. Miraron a Vettel, a Marchionne, a Arrivabene… ‘Dale, dale’.