El Real Madrid quiere seducir a los fanáticos del hockey
Uno de cada cinco canadienses juega en ligas federadas. La selección local de fútbol ocupa el puesto 100 en el ránking FIFA.
Conquistar Canadá, en términos deportivos, es una empresa harto compleja si no utilizas patines, un stick y te desplazas por una superficie congelada. El Real Madrid llega a un país que vive por y para el hockey sobre hielo, el gran deporte nacional y en el que son los campeones olímpicos. Un dato revelador: con 36 millones de habitantes, menos que España, hay federados 721.000 jugadores en ligas de hockey. Uno de cada cinco canadienses. En España, sólo tenemos 923 jugadores… En el inmenso país de la hoja de arce, el fútbol no despega: la selección ocupa el puesto 100 en el ránking FIFA.
Zidane y sus chicos, en todo caso, compiten no con el Montreal Impact, franquicia de soccer (su estandarte es Drogba) que actúa en la MLS, sino contra los Montreal Canadiens. Una religión, literalmente. En 2008 un profesor de la Université de Montreal creó un curso para debatir sobre la influencia de la religión y los Habs (así se conoce a los Canadiens). “Son una inspiración divina”, argumentó. “Cristiano es conocido pero aquí el ídolo supremo es Carey Price, el portero de los Habs”, te dicen cuando pulsas la opinión de la calle. Lo refrenda una imagen suya, de 10 metros de alto, en un lateral del Centre Bell, el pabellón de los Canadiens.
Mientras se ve si el Madrid puede evangelizar futbolísticamente Montreal, dos empleados del club ultimaron ayer los detalles en el Nutrilait Centre, la ciudad deportiva del Impact. No habrá muchas oportunidades de ganarse al pueblo canadiense. Sólo está programado un entrenamiento público, el último en Canadá (el día 25) pero será en el Saputo Stadium y para los abonados del Impact.
