Medellín pasó de la crisis de Leonel a ser finalista de Liga
Con altibajos y rumores sobre la salida del DT inició el semestre del DIM, que logró estabilizarse, hilar victorias consecutivas y ser ahora el mejor equipo con 46 puntos.
El camino no fue un jardín de rosas. A Independiente Medellín le tocó desde muy temprano remar contra la corriente, superar las adversidades, vencer sus miedos y ganarse a punta de trabajo un lugar en la final de la Liga I-2016.
Su historia empezó con un 2-2 frente a Bucaramanga, el nuevo inquilino de la A, que lo hizo ver mal en su primera presentación. Después vino la caída 0-1 con Junior y un triunfo aliviador sobre Envigado por el mismo marcador, además de la victoria con Cortuluá 2-0.
Pero pese a esos últimos resultados el fútbol del DIM no terminaba de convencer. Y en la cancha se veía que el cuerpo técnico no terminaba de encontrar al equipo. Era un grupo de buenos jugadores que poco trasmitían y que se apoyaban en los goles salvadores de Mao Molina, quien además marcó en la goleada 3-0 sobre Huila para hacer olvidar el pálido empate 2-2 con La Equidad.
El panorama se complicó con la igualdad con Deportivo Cali (1-1) y Patriotas Boyacá (0-0). El DIM tomó un respiro con una victoria (2-1) sobre Santa Fe en otra tarde clave de Mao, que mantenía al equipo a flote con sus goles como lo hizo en clásico con Nacional (1-1).
Con la caída con Deportivo Pasto empezaron los rumores de crisis. Llegaron a decir que el 'Poderoso' estaba dividido por dentro. Pero todos los dedos apuntaron hacia Leonel, quien en tres oportunidades tuvo su cargo tambaleando pese a que un triunfo 4-2 sobre Alianza Petrolera trajo paz y los directivos emitieron el 18 de abril un comunicado desmintiendo la salida el entrenador.
"Hay técnicos haciendo fuerza para que no logremos los resultados… es que el puesto de entrenador del Medellín es apetecido", dijo en su momento 'Leo' denunciando que habían colegas tras su cargo y admitiendo que "solo sirve ganar" para continuar frente al 'Poderoso'.
Y mientras crecían las versiones sobre un ultimátum y el empate 2-2 con Jaguares de nuevo trajo incertidumbre, el mejor Medellín estaba por salir a la luz. El triunfo bisagra fue en la fecha 14 sobre Rionegro Águilas, líder a esa altura del Apertura. Ese resultado le permitió cambiar su historia en el torneo y empezar a partir de ese 24 de abril su resurgir.
Cinco victorias consecutivas, incluyendo un 2-1 en el clásico antioqueño 289, lo llevaron a dar un salto a los primeros lugares y a empoderar a Leonel. Y ese momento inmejorable lo consiguió con los goles de Leonardo Castro, la grata revelación.
Las dos lesiones de Mao trajeron preocupación. Pero al final ni los problemas de indisciplina de Johan Arango desenfocaron al DIM, que optó por desvincular al volante porque a esta altura toda la plantilla tenía la meta clara: ser campeón.
Su presentación en el 'Todos contra Todos' la finalizó con un triunfo 1-0 sobre Millonarios que lo llevó a terminar como líder con 40 puntos y a llegar con ventaja a las series de eliminación directa. A esta altura, Leonel le había ganado la pelea a sus detractores y tenía en Luis Carlos Arias un as bajo la manga que fue determinante para llegar a la final.
En los cuartos tuvo que chocar con el Deportivo Cali de Mario Alberto Yepes y perder a Juan Fernando Caicedo por una hernia. Tuvo un mal juego de ida en Palmaseca. Y lo que pudo haber terminado con goleada del local en el primer tiempo, solo representó una caída 2-1 con un gol de 'Goma' Hernández que mantenía viva la ilusión.
En la vuelta el DIM fue implacable. Los tantos de Hechalar y Mao dieron el paso a la semifinal de forma directa. En esa instancia fue Cortuluá un digno rival. En el 12 de Octubre el 'Poderoso' sacó la casta y remontó 1-2 para regresar a casa con ventaja. Pero en el Atanasio Borja y Cardona forzaron a la definición por penales tras una gran presentación del elenco de Jaime de la Pava.
22 cobros y toda la presión sobre Medellín. Los fallos de Tipton, Piedrahíta y 'Goma' pusieron en riesgo el sueño. Pero así como durante el torneo dieron la mano Mao, Arias y Castro, en esta definición fue David González el que asumió toda la responsabilidad y con dos atajadas llevó al Medellín de la crisis a la final de la Liga I-2016 con Atlético Junior.
Este miércoles (7:00 p.m.) en el Metropolitano la banda de Leonel, fortalecida por las adversidades, las crisis y los triunfos, empieza a jugarse su obsesión: la sexta estrella.