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Indycar

Montoya tiene dos victorias antes de las 100 ediciones de Indy 500

El colombiano fue el último ganador de las 500 Millas de Indianápolis. AS repasa su doblete en el óvalo más famoso del mundo en el que saldrá en el puesto 17 este domingo.

Juan Pablo festeja su victoria en 2015.
STEVE C. MITCHELLEFE

Indianápolis es una ceremonia en sí misma. Solemne, tiene ritos y códigos consagrados para sus vencedores. Brindar con leche, emocionar a los 350 mil aficionados y dos mil periodistas que acompañan la carrera y besar el brickyard, la franja de ladrillos que fija la meta tras las 250 vueltas.

Juan Pablo Montoya fue el último piloto que lo hizo. Ganó la competencia en 2015, catorce años después de su primera victoria antes de unirse a la Fórmula 1. Su doblete tiene un lugar en la historia de la que se considera como la carrera más importante del mundo. AS Colombia recuerda esos triunfos. 

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Chris GraythenAFP

Montoya ganador en 2000

El automovilismo de monoplazas norteamericano estaba fracturado. La Indy Racing League (IRL) y la CART competían por el protagonismo de un deporte que sabe enloquecer a los Estados Unidos. Montoya era el campeón de la segunda categoría y su jefe Chip Ganassi, preparó dos autos de su escudería para correr en el óvalo de 2,5 millas. 

Un piloto de la CART en el terreno sagrado de la IRL. El bogotano se montó en el carro número nueve. Su biografía autorizada escrita por Christopher Hilton en 2003 recuerda que antes del tradicional “gentleman, start your engines”, hubo ambiente hostil pues había declarado que la de Indianápolis era sólo una pista más. "Todavía había rivalidad entra la CART y la IRL, y Montoya en Indy era extranjero en ambos sentidos de la palabra (...) La prensa difundió en cantidades de artículos algunas observaciones suyas y la gente las leyó. Así que lo estaban abucheando". 

Al final lo aplaudieron. Le ganó a otros 32 competidores. Lideró 167 de las vueltas y con siete segundos de ventaja cruzó en primer lugar. Llegó a poner la aguja de su velocímetro en los 360 kilómetros por hora. 

"Lo más difícil fue tener todo en orden. Tratar de estar tranquilo. Hay que ponerse agresivo. En cada vuelta yo tenía que mantenerme presionando el acelerador", explicó. 

Montoya ganador en 2015 

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STEVE C. MITCHELLEFE

La IRL y la CART firmaron la paz en 2008. Juan Pablo volvió a la categoría en 2014 con uno de los equipos más poderosos, el de Roger Penske. Adaptado a las condiciones de la IndyCar repitió su triunfo el año pasado. Fue una demostración de que su talento está intacto. En los primeros giros un roce con un rival lo envió al fondo de la grilla. 

Tardó tres horas con nueve minutos para dejar atrás a 29 carros y tomar el comando de la Indy 500. Las últimas tres vueltas fueron a prueba de nervios. Su compañero Will Power lo apretó, pero Montoya le ganó por pocos metros con su Chevrolet. 

"Tenía la sensación de tener un gran auto, pero esa pelea del final fue muy dura, todo el tiempo a fondo hasta el final. Ha sido muy alucinante. Entendemos el riesgo y cuándo hay que tomarlo", dijo. 

Este domingo 29 de mayo saldrá desde el puesto 17. "En Indycar hay muchos factores que entran en juego, no sólo la velocidad del auto. Hay mucha estrategia en la carrera por parte del piloto", expresó en una entrevista con la agencia AFP.

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ROBERT LABERGEAFP

Las edición 100 de la competencia será a las 10 de la mañana.