Piloto William Barbosa compite en el Blancpain Super Trofeo
El villavicense corrió el primer round de esta competencia en Monza, Italia el pasado 23 y 24 de abril logrando recuperar 20 posiciones hasta alcanzar el puesto 14 en la clasificación.
El fin de semana del 23 de abril inició el Blancpain Super Trofeo de Lamborghini 2016 con la carrera de Monza, Italia, en la que el piloto colombiano William Barbosa superó varias posiciones para hacerse con el puesto 14 en la clasificación general.
Inicialmente, el colombiano que compite en el equipo italiano Bonaldi Motorsport patrocinado por Llanogas y Cusianagas junto con el puertorriqueño Ricardo Vera, clasificó en la posición 23, pero debido a una vibración en el auto se hicieron los debidos ajustes en pits por lo que tuvo que salir de nuevo en la posición 47.
Esta competencia monomarca consta de una serie de rondas de a dos carreras (sábado y domingo) en la que compiten cerca de 50 vehículos Lamborghini Huracán de 630 caballos de potencia. Hay tres competencias que se desarrolan al tiempo en Norteamérica, Europa y Asia, y al final de la temporada se corre la final mundial que cada año se rota entre alguno de los 3 continentes. Este año la final será en Valencia, España.
Las próximas fechas para las carreras de la serie Europa son:
Mayo 14 y 15 en Silverstone, Inglaterra.
Junio 25 y 26 en Paul Ricard, Francia.
Julio 30 y 31 en Spa Francorchamps en Bélgica.
Septiembre 17 y 18 en Nurburgring en Alemania.
William Barbosa es una de las promesas del automovilismo en Colombia. Comenzó desde muy pequeño en la categoría infantil del Easy Kart 60 c.c. en el 2005. Cinco años después se coronaría campeón nacional por primera vez en el Easy Kart Colombia, para luego retener el título por 3 años consecutivos.
En el plano internacional, el villavicense ya ha debitado en el Campeonato Abierto de Euroformula con el equipo italiano Corbetta Competizioni en el 2014 y en la Euroformula Open con el equipo BVM Racing en el 2015.
Con las próximas carreras, William seguiría consolidándose como una carta fuerte del país para aspirar a competir en la Fórmula 1, como lo llegó a hacer en su momento su ídolo de infancia, Juan Pablo Montoya.