A pelear
Así quedó el panorama para Santa Fe, después del empate a un gol con los brasileños del Corinthians. Estos se marcharon con la seguridad de avanzar a la ronda siguiente de la Copa. En cambio para los cardenales es ir a Paraguay a la llamada Olla de Cerro Porteño a trabajar por los puntos. Sea ganando o empatando y pensando en el gol diferencia.
En el primer tiempo, Santa Fe estuvo más incisivo y dueño de la actividad frente a Cassio. Es más, la visita no quería o no se atrevía a buscar el arco de Zapata. Hasta que apareció la jugada, previo rebote en el palo y el gol del pelado Antony.
Por momento viendo a los brasileños me acordé de una viejísima película mexicana, titulada." Qué tiempos aquellos señor Don Simón…" Porque no mostraban nada, ni lujos ni ofensivamente peligro alguno.
Pero en el segundo tiempo la historia cambió. Santa Fe, se fue quedando y dejando espacio a los contrarios. Hilvanaron algunas jugadas, hasta que Elías concluyó con un remate por el centro del arco, sin dar opción a Zapata.
Ingresó Omar Pérez y muchos nos quedamos esperando alguno de sus pases efectivos. Lo intentó, sin éxito. Después en un descuido el paraguayo Romero estuvo cerca de sentenciar el marcador, al igual que Pablo Rojas. Todo se patentó con un empate. A los de Tite les sirve. A Santa Fe lo pone contra la pared. A conseguir puntos en Asunción, con la ventaja de estar el equipo integrado con jugadores de entereza y entrega y sin complejos. Es cuestión de ponerle Fe.
En conclusión, fue justo el empate. Mejor el local en la inicial, y con más salida del visitante para el segundo tiempo. Ambos cuentan con el perfil para seguir, así le resulte más fácil a Corinthians porque cerrará en su casa... Uno de los problemas del equipo de Alexis García, me parece está en los laterales. Tanto Valencia como Otálvaro se muestran activos y con ganas de ser salida para el equipo, aunque carentes de sorpresa. Se repiten mucho en las intenciones y sus acciones son casi previsibles. Y es importante recordar que en el fútbol siempre la sorpresa es la más desequilibrante. Y eso faltó.