1-0, ¿alcanza?
En los juegos de ida de las semifinales, se presentaron hechos para resaltar. Los dos árbitros, Adrián Vélez y Murillo trabajaron bien y dejaron de lado la fea costumbre de mostrar tarjetas amarillas por mostrar. Mal negocio para Dimayor, porque dejan de recibir billete por multas, aunque mejora el espectáculo por continuidad. Claro que los dos juegos fueron intensos y con intenciones claras de aplicar cada uno su esquema y manera de jugar.
El Junior planteó un juego inteligente y apropiado para la clase de jugadores que tiene. Muy seguro en defensa y tratando de aprovechar la velocidad y pique de Toloza, así haya estado impreciso y Ovelar, que en solitario se las arregló para localizar un remate seco y abajo los tres puntos. Pecado si, la forma como le hicieron “calle de honor” los defensas del Tolima. Merece si distinción la forma como Sebastián Viera, atajó, tapó todas las posibilidades de gol del local, que gastó energías pero tropezó con el arquero uruguayo.
Caso parecido pasó con Medellín-Nacional. Los rojos quienes oficiaron como locales, llevaron la iniciativa, atacando y creando, no tantas opciones de gol en la inicial, aunque Armani tuvo buen comportamiento. En la complementaria, aflojó el ritmo y es cuando uno, como observador recurre a una frase invalida: “están estudiando y respetando al contrario” La lectura real es una sola. Cansancio y conformismo por el empate. Llegó una buena jugada colectiva del Medellín y el definidor, Caicedo, estaba donde siempre debía estar. En el área rival y no botando energías correteando por los costados. Allí localizó la victoria de “El Poderoso”.
Nacional reaccionó después del gol y funcionó mejor y apareció Duque, gracias al ingreso de Guerra y Bernal, quienes “sacudieron” al grupo, adormilado y conformista, mientras estuvo Macnelly. Para completar, Gilberto García y Farid se despreocuparon de apoyar por los laterales.
Claro el 1-0, está más para ayudar a Junior en el Metropolitano. En el Atanasio, ambos son locales y habrá parcialidad verdolaga empujando a Nacional. Se ve a Junior más cerca de la final y entre Nacional y Medellín el asunto sigue parejo.