Al Milan de Sinisa Mihajlovic le ha costado mantener su nivel en la Serie A. Es un equipo irregular, sin orden táctico y con desorden ofensivo. La única diferencia es que, en cinco partidos de Liga, ha tenido la fortuna de encontrar el buen pie de Carlos Bacca. Sin embargo, el delantero no pasa por un buen momento y el Milan no pasó del empate 0-0 en su visita al Carpi.
El DT volvió a utilizar el 4-3-3, con Niang, Bacca y Cerci como tridente ofensivo. El esquema no le conviene a Bacca, pues desde que se implementó dicho módulo no ha vuelto a marcar (su más reciente gol fue el 1 de noviembre ante Lazio).
Ante el Carpi, Bacca no tuvo ninguna opción clara de gol. Los desbordes de Cerci y Niang nunca terminaron en pases al delantero y los volantes de buen pie como Montolivo y Bonaventura nunca habilitaron al exjugador del Sevilla.
Con el empate, el Milan bajó a la octava posición y en la siguiente fecha enfrentará al Verona.