El fútbol argentino aún se sostiene en pie

Le quitan jugadores cada semestre porque ahora seis goles en primera división ya dan cartel en Europa. La tragedia lo intimida con la violencia. Técnicos y futbolistas son agredidos con frecuencia desde las tribunas. Un sector de hinchas ve enemigos a los de su misma camiseta. Se juega sin público visitante. La muerte lo ronda fuera de las tribunas y hasta en el mismo campo de juego. 200 personas perdieron la vida desde 1975. El torneo tiene hoy 30 equipos y mañana 20, nunca se sabe. Hay dirigentes sospechados de corrupción. Arbitrajes por lo bajo. Un ataque con gas pimienta se justifica para sacar rivales del camino.

Sin embargo, el fútbol argentino recobra el aliento cuando repasa sus últimos logros. Siete Copas Libertadores en los últimos 15 años, una final del Mundial en 2014, una final de la Copa América hace un mes. San Lorenzo y River Plate, reyes de América consecutivos.  Algo tiene que aún lo sostiene en pie.

Diego Latorre destaca el gesto de Carlos Tévez por regresar a un fútbol en esas condiciones. Así mismo, valora la actitud de los hinchas de Boca Juniors que llenaron La Bombonera de emoción para recibirlo. “Respondieron con la nostalgia”, dijo en una entrevista a La Nación de Buenos Aires.

El ex futbolista sostiene que se necesita de un fútbol más ingenuo, menos intoxicado. Esa fórmula quizá lo haría el mejor del mundo. Aún enfermo, el fútbol argentino da pelea. Que buena noticia.