Final inolvidable: mitos del River - América en el Monumental
River no clasificaba a una final de Libertadores hace 19 años. La última vez la jugó frente al América de Cali. De ese día quedaron anécdotas curiosas que AS Colombia trae de regreso.
Tiren papelitos
En el primero de los goles de Hernán Crespo, uno de las figuras de ese juego, el área del equipo colombiano estaba tapizada de papeles. Fue comenzando y esa anotación aumentó la confianza de los argentinos.
¿Ramón o Francescoli?
Del camerino local surgió uno de los enigmas más grandes de ese partido. ¿Quién dio la charla técnica? El técnico era Ramón Díaz que completaba tres meses y medio a cargo del equipo. Como es habitual repasó movimientos y arengó a sus dirigidos. Cuando terminó, el capitán Enzo Francescoli le pidió un rato a solas con sus compañeros. El mito dice que las palabras del uruguayo fueron definitivas para asegurar el título.
Varios de los protagonistas de ese partido se confesaron con la revista El Gráfico. Una de las preguntas siempre apuntó a lo que les dijo Enzo sin la presencia de Díaz. El ex arquero y ahora asistente técnico de Diego Simeone en el Atlético de Madrid opinó al respecto:
¡Cómo va a haber sido Francescoli el técnico de aquel equipo si hoy ni es técnico! El mérito de ese temple ganador era de Ramón, quien era temeroso, pero volvía su miedo en un ataque feroz. Sólo dudó ese día contra el América de Cali, en River, y por eso se armó ese mito"
También en El Gráfico, Francescoli minimizó el efecto de su mensaje en ese vestuario. En cambio, si se quejó por el olvido del entrenador que no mencionó a los jugadores en sus agradecimientos por el logro continental.
"Que subiera al escenario en una cena después de ganar la Libertadores y agradeciera a todos menos a los jugadores rompe las pelotas. Estábamos en la mesa y nos mirábamos re calientes. Algunos me preguntan por la rivalidad. Vos te podés olvidar del kinesiólogo, del utilero, pero de los jugadores... Es como que yo gane un premio, suba y me olvide de agradecer a mi mujer y a mis hijos. Me puedo olvidar del perro (risas), ¿pero cómo te vas a olvidar de los tipos que, por más fenómeno que seas como técnico, hacen lo que vos querés que hagan?".
Todas las finales dejan historias que contar y la de este miércoles no será la excepción.