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Hernán Peláez

Así sí...

Santiago de ChileActualizado a

Si ante Venezuela jugamos con la mente en blanco,contra Brasil hubo lucidez y recuperación de la memoria futbolística. Fue evidente y palpable la concentracion y atención de todos los jugadores, pero mucho mas el exitoso trabajo en la zona de volantes. Alli Carlos Sánchez y Edwin Valencia, no solamente neutralizaron a los rivales, sino que se dieron maña para auxiliar, y ayudar a los laterales Zuñiga y Armero.

Su gestión fue de grandes gestos de solidaridad, algo necesario y que siempre se reclama en jugadores de su estilo. Quitar, cerrar salida a los contrarios y en sus posibilidades, entregar la pelota a los llamados a organizar el juego como son James y Cuadrado.

Admitiendo el discreto nivel de Brasil, donde quien mas preocupaba era Neymar, la Seleccion Colombia, no llevó la iniciativa únicamente, sino que consiguió buenos movimientos delante del sistema defensivo de Brasil, que esporádicamente tuvo salidas de Filipe Luis y al final Dani Alves. En general el arquero Ospina solo sufrió un susto, cuando resbaló y Firmino no acertó en un remate que llamaba a gol.

Si habíamos jugado muy mal en la primera salida, esta vez se notó el deseo de buscar control de partido, jugando en el medio campo como correspondía. Mas que la recuperacion espiritual se confirmó aquello de "crecer" en la medida que el rival sea grande, así fuera en este caso solo de nombre.

Asi si queriamos ver a la Seleccion Colombia que organizó el puntaje y faltando el choque con Peru, matemáticamente esté viva y con seguridad de poder avanzar. Hay con que y con quienes. Es bueno reconocer que Pekerman consiguió mucho mas que lo anhelado por muchos, incluyéndome a mi. Un punto servía. El obsequio de los muchachos fue maravilloso. Tres puntos y un nuevo empujón a las ilusiones de todo un pais futbolistico....