Esteban Chaves, la sonrisa de Colombia en el Giro
El 15 de febrero de 2013 todo parecía acabado. La carrera de Esteban Chaves en el ciclismo se venía abajo por una lesión en su brazo derecho luego de una caída mientras corría el Trofeo Laigueglia con el Team Colombia. Su padre, Jairo Chaves, contó que Esteban quería darse por vencido, retirarse del ciclismo. Veía acabada su carrera porque el brazo quedó casi sin movimiento y no sabía qué más hacer si el ciclismo se alejaba de su vida.
Fue entonces cuando la fuerza de su padre y el apoyo de su madre lo levantaron y no dejaron que se hundiera en el dolor y la amargura que le provocaba la lesión. Meses después, la sonrisa que caracteriza al ciclista bogotano regresó y, aunque por momentos la dureza de su recuperación lo hacía dudar, su padre no dejó que su sueño de ser ciclista profesional se perdiera.
Hoy, dos años después de su accidente, Esteban, de 25 años y parte del Orica GreenEdge, es el mejor colombiano después de siete etapas del Giro de Italia. Ya portó la camiseta de la clasificación de los jóvenes y estuvo en el segundo lugar de la general.
Ahora es sexto, ha hecho una gran carrera, su rendimiento ha estado por encima de las expectativas, es el mejor de su equipo, no se ha escondido ante el reto de estar arriba en la clasificación, se ha mantenido al ritmo de los más grandes, fue de gran apoyo para los líderes que tuvo su equipo en las primeras etapas (Michael Matthews y Simon Clarke), acompañó a paso firme el tren del Orica en la contrarreloj por equipos y su equipo confía plenamente en él para la montaña que comenzará el sábado con una llegada con gran premio de primera categoría en Campitello Matese luego de 186 kilómetros de recorrido.
Puede que baje o que suba en la general. El ciclismo es tan hermoso que no se puede pronosticar el rendimiento o las actuaciones de ninguno. Una etapa puede ser apta para uno pero la gana otro, o la puede ganar el favorito pero puede haber una caída que desordena y tira al piso todo lo que se trabajó, como pasó en la sexta fracción.
Así que sea cual sea su resultado cuando termine la etapa 21, lo hecho por Chaves es para resaltar. Pero no es casual, ni circunstancial. Ya había mostrado su nivel en el 2011 cuando ganó el Tour de l’Avenir con el equipo Colombia es Pasión, fue tercero en las Lagunas de Neila en la Vuelta a Burgos en la que también ganó una etapa. Y ganó una fracción en la Vuelta a Suiza y en el Tour de California.
‘El Chavito’ como le dicen de cariño, dijo en una entrevista con el portal esciclismo.com que la movilidad de su brazo no va a ser la misma, que no se moverá al cien por ciento pero que su vida como ciclista se pudo recuperar y ahora la vive al máximo.
Hay mucho todavía para ver de Esteban, la sonrisa más grande del pelotón mundial, tiene por delante lo que falta del Giro y la temporada completa. Además, en su tiempo también hay un momento para ver por la escuela de formación que maneja su padre en Bogotá.
Rigo
“No sé lo que va a pasar, hay que esperar. Si 1 minuto 22 segundos es mucho o es poco, no lo sé. Hay que seguir trabajando”. Si el mismo Rigo no lo sabe tampoco lo sabemos nosotros. Es arriesgado decir que perdió el Giro, así como también que lo va a ganar. Una gripa hizo que perdiera tiempo valioso en la subida a Abetone y el abandono de dos de sus compañeros del Etixx Quick Step hace que no tenga la ayuda que requiere un capo en una carrera como el Giro.
Si no hay equipo es difícil luchar y eso se ha visto con la potencia que llevan el Tinkoff y el Astana para sus jefes de filas. La contrarreloj puede hacer la diferencia para el antioqueño, así como los segundos que logre recortar en las etapas que la preceden. Su forma no es la misma que tenía hace un año pero con Rigo todo se puede esperar.
Carlos Betancur
Un párrafo aparte para Carlos Betancur. Fue el mejor colombiano en la séptima etapa y cada día se ve mejor. Está de regreso. Un motivo de alegría para quienes creemos que todavía no ha conseguido lo que merece en su carrera deportiva.