Botero: “El vínculo con Europa ha hecho crecer el ciclismo”

Santiago Botero marcó una de las transiciones del ciclismo en Colombia. Despuntó con los recuerdos casi marchitos de las gestas de Luis Herrera y Fabio Parra en Europa e inspiró a la nueva generación que empieza a acostumbrarnos con el protagonismo en las grandes carreras.

A comienzos del siglo como ciclista de Kelme fue campeón de la montaña en el Tour de Francia y en 2002 demostró su versatilidad sobre la bicicleta al ganar una contrarreloj en esa misma competencia. El primero y único colombiano que lo ha logrado. Esa misma condición la refrendó con la medalla de oro por salir campeón mundial de crono en ruta. 

Ahora como técnico del equipo Orgullo Antioqueño y comentarista ocasional de las carreras europeas, opina sobre el ciclismo que viene en alza desde 2012 y que en 2015 ya repartió logros para los colombianos como la medalla de oro en Omnium de Fernando Gaviria y el nivel de Nairo Quintana en la Tirreno-Adriático que avanza por Italia.

¿Le sorprendió la fuga de Nairo?

Fue fulminante. No dejó con opción a nadie. Como iban muchos todavía nadie esperaba que atacara tan temprano y Nairo supo leer muy bien su cuerpo, porque también hay que aprender a saber cómo esta uno. Arriesgó y le salió bien en un lote que excepto por Froome, tenía a los mejores ciclistas del momento.

¿A qué atribuye los triunfos del ciclismo colombiano en los últimos años?

Colombia ha sido un país que siempre ha estado exportando ciclistas, ha habido momentos en que se ha roto el vínculo con Europa, cuando se acaban los equipos grandes, hubo un lapso de tiempo donde no hubo mucho protagonismo en Europa. Acá en Colombia el ciclismo siguió desarrollándose igual inspirándose en los referentes del momento.

¿Por qué gustan los colombianos en Europa?

En Europa ha habido una cierta escasez de escaladores rompe carreras, y el que haya llegado Rigo y haya llevado otros amigos, que hayan descubierto a Nairo aquí, ha catapultado la búsqueda de corredores colombianos.

Colombia tiene la genética para dar buenos ciclistas, para ser buenos escaladores y hay grandes sorpresas como estamos viendo con Gaviria, Es muy bueno que corran en Europa pero no podemos descuidar el proceso de formación en todas las categorías, no sólo en las elites.