Reacciones sobre el piloto de Fracking en Puerto Wilches, Santander
La ANLA autorizó un piloto de fracking en Puerto Wilches, Santander y se reaviva la polémica por la necesidad de prohibición de esa práctica.
Ecopetrol obtuvo autorización de la ANLA para ejecutar el Proyecto Piloto de Fracking Kalé, en Puerto Wilches, Santander a pesar de la larga lista de cuestionamientos y oposición que tiene el método de fracturación hidráulico. El pasado viernes 25 de marzo la Agencia Nacional de Licencias Ambientales emitió un documento en el que dió luz verde al piloto de fracking, con el que Ecopetrol pretende crear un pozo de 60,96 metros de profundidad y una trayectoria de 1.219 kilómetros.
En la resolución de la ANLA, la entidad explica que el piloto es aprobado teniendo en cuenta los antecedentes del Gobierno Nacional, que estableció criterios para ‘’aprovechar los recursos’'. Según la institución “a través del Decreto 3004 del 26 de diciembre de 2013, el Gobierno Nacional estableció los criterios y procedimientos aplicables a la exploración y explotación de hidrocarburos en yacimientos no convencionales, con el fin de incorporar las especificaciones técnicas requeridas para lograr el aprovechamiento integral de los recursos naturales no renovables que comprende esta clase de formaciones, bajo parámetros que conduzcan la observancia de las disposiciones ambientales vigentes”.
Reacciones y oposición al proyecto
Tras revelarse la autorización de la ANLA, organizaciones y líderes ambientales se han opuesto al piloto puesto que esta práctica afecta no solo el territorio sino también a la comunidad de la región. En Radio Nacional, el líder Oscar Sampayo mencionó que esta autorización ignora lo que ya se ha demostrado del Fracking. “Vemos con preocupación que la ANLA no tiene en cuenta la información suministrada por las comunidades de pescadores artesanales, de campesinos y pobladores de Puerto Wilches en donde cuestionan y rechazan la utilización de esta técnica”, expresó el líder.
Por su parte, en una pronunciación pública, la Alianza Colombia Libre de Fracking manifestó que la ejecución de este proyecto viola la Constitución ecológica de 1991, el Acuerdo de París, el Convenio de Río de Janeiro y la Convención Ramsar. En todos ellos se defiende, protege y vigila el accionar de los países incluidos, frente al medio ambiente y las garantías de desarrollo sostenible.
“Es lamentable que un tema fundamental en materia energética no se haya debatido en el Congreso de la República, donde los aliados del gobierno dilataron por tercera vez consecutiva la discusión de los proyectos de ley para prohibir el fracking, y sea decidido por el Gobierno Duque, de afán, sin garantías, y a pocos meses de la posesión de un nuevo Presidente”, destaca la Alianza.
Además, sobre la vía libre que le dio la ANLA al fracking, varios políticos han manifestado su desacuerdo, puesto que critican que en el gobierno del presidente Iván Duque, en el que la bancada en el Congreso es mayoría, se aprobó un piloto para explotar recursos a través de un método que por años se ha intentado prohibir, pero se negó a ratificar los Acuerdos de Escazú. El congresista electo Wilson Arias manifestó que “primero aprobaron los pilotos del fracking que el Acuerdo de Escazú. Eso sí, Ivan Duque sale de Colombia y se ufana de ser el más ambientalista del mundo”.
Asimismo, Camilo Romero, que fue precandidato presidencial por el Pacto Histórico, destacó que la ANLA no solo aprobó este PPI sino que lo hizo en tiempo récord. “La ANLA, le da una bofetada al país y la lucha de las comunidades, aprueba en tiempo récord licencia para primer piloto de Fracking en Puerto Wilches, Santander”, escribió el exgobernador de Nariño.