Estos son los electrodomésticos que todo el mundo tiene conectados y reducen la velocidad del Internet en casa

Conectamos cada vez más dispositivos al WiFi de casa, desde celulares hasta aspiradoras inteligentes. Pero, ¿sabía que algunos electrodomésticos comunes pueden estar afectando la velocidad de tu conexión? Aunque no lo parezca, el enemigo de su Internet rápido podría estar justo en su cocina o sala.

Aunque hay unos de estos aparatos que para nada necesitan contar con una conexión a la red de internet, podrían interferir en momentos clave de diversión o de trabajo en casa, así que en AS Colombia lo instruimos para que sepa lo que debe hacer y cómo actuar.

El microondas: un clásico que interfiere

Parece inofensivo, pero el microondas es uno de los mayores enemigos del WiFi. Al funcionar, emite ondas electromagnéticas que pueden interferir directamente con la banda de 2.4 GHz, la misma que usan muchos routers domésticos. ¿El resultado? Cuando calienta su comida, la señal podría debilitarse o incluso cortarse por completo en algunas zonas de la casa.

Cámaras de seguridad y monitores: siempre conectados

Las cámaras de videovigilancia y monitores para bebés o mascotas son útiles, pero consumen un ancho de banda considerable. Si transmiten video en alta definición constantemente, se convierten en usuarios pesados de la red, afectando la calidad del Internet para el resto de dispositivos. Además, si están mal ubicados o en zonas de poca señal, pueden forzar la red aún más.

Luces LED y bombillos inteligentes

A primera vista, no parecen problemáticos. Sin embargo, los bombillos inteligentes y las luces LED conectadas a la red WiFi pueden acumularse rápidamente, especialmente si tienes varios en casa. Cada uno requiere una conexión constante al router para recibir comandos o integrarse con asistentes virtuales. Cuantos más tengas, más saturada puede volverse tu red, sobre todo si usas un router básico o con pocos canales disponibles.

Asistentes de voz y electrodomésticos inteligentes

Alexa, Google Home, refrigeradores y hasta cafeteras conectadas: todos estos aparatos están activos todo el día, esperando comandos o enviando información. Aunque su consumo individual puede ser bajo, el uso conjunto genera una demanda constante que sobrecarga el router, sobre todo si es un modelo básico o antiguo.

¿Qué hacer para evitar esta situación?

Para mejorar la conexión, identifique cuántos dispositivos están conectados al WiFi y qué hacen en segundo plano. Intente cambiar los aparatos más problemáticos a la banda de 5 GHz (si es compatible), o incluso conéctelos por cable Ethernet. Y por supuesto, evite usar el microondas cuando esté en una videollamada importante.

No necesita desconectar todo, pero sí puede ser más estratégico. Actualice su router, ubíquelo en una zona central de la casa, y limite el uso simultáneo de varios dispositivos pesados. Pequeñas decisiones como estas pueden marcar una gran diferencia en su experiencia de navegación, streaming o gaming.

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