Acércate a Japón sin salir de Colombia: el imperdible bosque de bonsáis que emula al país nipón y queda cerca de Bogotá

Si usted es amante de la cultura japonesa o simplemente buscas un plan diferente cerca de Bogotá, el bosque de bonsáis es una opción que no puedes dejar pasar. Ubicado a solo una hora de la capital, exactamente en el municipio de La Calera, este lugar ofrece una experiencia única que transporta a los visitantes al corazón de Japón sin necesidad de viajar miles de kilómetros.

Este maravilloso bosque alberga cientos de bonsáis cuidadosamente cultivados, algunos con décadas de antigüedad. La meticulosa técnica japonesa de miniaturización de árboles se refleja en cada ejemplar, creando un ambiente de serenidad y armonía que recuerda a los tradicionales jardines japoneses.

El Dragón Dorado Bonsái es un jardín fundado por el filósofo portugués Merceano de Jesús Melo y su esposa, Libia Patricia Pérez, quienes han dedicado más de una década a construir un santuario de bonsáis y meditación. Según le contó al diario El Espectador, llegó a este arte milenario gracias a la filosofía, la ética y el pensamiento comparado.

“Como maestro he buscado puntos de referencia, y mi forma de enseñar el pensamiento de la humanidad es comparando Oriente con Occidente”. Hoy tiene más de mil árboles, aunque realmente nunca los ha contado. “A mí me ha cambiado totalmente la vida, empezando por este lugar”, aseguró durante la entrevista.

El Dragón Dorado, un lugar para aprender y meditar

Más allá de su belleza estética, el bosque de bonsáis invita a la reflexión y la paz interior. Su recorrido permite disfrutar de la naturaleza en un espacio pensado para el descanso y la contemplación, ideal para quienes buscan un respiro del ajetreo citadino.

“No se trata simplemente de árboles pequeños, ni de una especie en particular. Un bonsái puede surgir de cualquier material vegetal. Es una representación minimalista de un árbol en la naturaleza, una metáfora”, relata Melo, quien transformó su vida en los mismos terrenos donde se encuentra el museo, en el vasto Rincón de La Calera.

El bosque también ofrece la posibilidad de aprender sobre la historia y el arte del bonsái. Los visitantes pueden conocer más sobre las técnicas de cultivo, su simbolismo en la cultura japonesa y cómo estos pequeños árboles representan la paciencia y el equilibrio en la vida.

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