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Fútbol colombiano

Hermano de Jeison Murillo, de la tormenta, a goleador del Ascenso

Junior Murillo siempre fue goleador en las categorías menores del Deportivo Cali. Sin embargo, es más lo que ha sufrido que celebrado. Su hermano es quien ha sostenido el alto vuelo.

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Hermano de Jeison Murillo, de la tormenta, a goleador del Ascenso
Colprensa.

Los destinos de los hermanos Murillo han tenido un contrasentido. Jeison, en una posición de menor notoriedad, inició un prematuro vuelo, que ya incluye, dos Mundiales juveniles (Sub-17 en 2009 y Sub-20 en 2011) y dos Copa América (Chile 2015 y USA 2016), además de su actualidad en el legendario Inter de Milán. Su hermano, Junior, un año mayor, y quien convivía con los goles en las categorías menores del Deportivo Cali, ha tenido un tempestuoso camino. Hoy, luego de tantas oportunidades negadas, es el goleador del Torneo del Ascenso con Orsomarso, que dirige Alex Escobar.

“Estuve en las divisiones menores del Cali, desde los 8 años y durante 10 años. En el equipo Sub-18 compartía en la delantera con Luis Fernando Muriel. En todos los Torneos de Liga salí goleador. ‘Manga’ Escobar y Fabián Castillo eran los suplentes. A veces me ponían solo en la delantera y sentaban a Muriel”, rebobinó en diálogo con AS Colombia, Junior Murillo, quien el próximo 20 de mayo cumplirá 26 años de edad.

Brotados del fértil satélite del Deportivo Cali en el barrio Andrés Sanín, Junior ha mantenido con fortaleza la resistencia, desde sus inicios, hasta su interrumpido salto a la categoría profesional, en Ligas marginales y con escasas garantías.

“A veces no teníamos para el transporte para ir a entrenar a Andrés Sanín y nos íbamos en bicicleta. El fútbol requiere de trabajo y de un poco de suerte. Siempre estuvimos cogidos de la mano. Mi hermano fue a un Suramericano, luego al Mundial y se le dieron todas las cosas. Y yo, me desvinculé del Cali en el 2011, cuando sacaron a Jorge Cruz y llegó Rubén Insúa. Él no nos paraba bolas a los menores. Estuve un año parado, algo aburrido y se dio la posibilidad de ir a una segunda división en El Salvador”, comentó Junior.

En El Salvador también puso a prueba su aguante. “Allá el fútbol es marginado, no te ponen cuidado, no hay concentraciones, ni ropa de entreno, te dan la vivienda, pero no la alimentación. Se demoran mucho los pagos. Necesitaba estar activo y fui a regalarme, pero eso me sirvió mucho. Me dijeron que me quedara, pero allá no se queda nadie. Fue duro, pero eso ayuda a madurar, a no bajar los brazos. Esos golpes me ayudaron mucho”.

Su travesía por Centroamérica continuó en Panamá. “Quedé campeón con el Plaza Amador, dirigido por el colombiano Jair Palacios”. Y luego de probar con más deseos que fortuna en varios equipos del fútbol colombiano, recibió la oportunidad en Orsomarso, que ocupa la quinta posición en el Torneo del Ascenso (25 puntos) y que le bastará con sumar un punto en la última jornada, como visitantes frente al Real Cartagena, para clasificarse a la serie final.

Junior logró el gol con el que los dirigidos por Alex Escobar vencieron 1-0 a Llaneros en la pasada jornada y se encumbró en la tabla de goleadores del Torneo de la B (8 goles). “La confianza que me ha dado el profesor Alex Escobar ha sido vital. Además, tengo un magnifico grupo de compañeros”, reconoció.

Y amplió, sobre su actualidad y sus aspiraciones: “Estoy muy contento, pensando en la clasificación con Orsomarso, en dar la pelea. Este grupo viene de menos a más. Luego quiero jugar en la A, demostrar todo lo que tengo; quiero hacer goles, volver a sonar, porque estaba un poco marginado, y estar en primera es lo que anhelo. Ser hermano de Jeison es un plus, él tiene un nombre en Europa, sin embargo, lo que cuenta es mi trabajo. Con la ayuda de Dios las cosas se me van a ir dando. Soy muy pícaro en el área y tengo buen salto. El 80% de los goles los he hecho de cabeza”, detalló Junior, quien mantiene comunicación a diario con su hermano Jeison.

En el fútbol mundial son más valorados y hasta sobredimensionados quienes finalizan con acierto las jugadas. No obstante, en el caso de los hermanos Murillo, el defensa es quien ha sostenido su alto vuelo.