Buitrago: “Sentía como si anoche me hubieran cogido a garrote”

Santiago Buitrago cruzó la línea de meta de este domingo en la posición 168 a 6 minutos y 58 segundos del ganador, Tim Merlier. Dos días después de su fuerte caída, el colombiano afirmó que sufrió más en esta etapa, que en la del sábado.

“Hoy la sufrí más que ayer. Se hicieron eternos los kilómetros hoy, esperemos que mañana amanezca mejor y que venga el día de descanso”, afirmó Buitrago a ESPN al finalizar la novena etapa del Tour de Francia.

Santiago pedalea incómodo en el Tour

Las heridas en la espalda y el muslo le cobran a Buitrago. El corredor del Bahrain no sufrió conmoción cerebral tras la caída del viernes donde estuvo en duda su continuidad y apenas fueron laceraciones que le permiten seguir en carrera.

Sin embargo, el colombiano manifestó que no pasó una buena noche y que a lo largo del día en la etapa entre Chinon y Chateauroux (174,1 km) sufrió bastante, aunque se aferra a estar mejor este lunes en un reto de montaña.

“Sentía como si anoche me hubieran cogido a garrote. Menos mal cuando cogí el grupo quedaban 15 km a meta, entonces mejor. Pero la pasé bastante mal todo el día, mañana un día complicado, pero ya veremos”, agregó el corredor.

Bahrain mantiene su confianza en el colombiano

El equipo destacó que Santiago pudiera continuar en carrera, pues es el líder de escuadra y aunque Haig si tuvo que abandonar, las esperanzas en ganar una etapa o volver al top 10 de la general ilusionan con el colombiano.

“Santiago Buitrago no sufrió conmoción cerebral, pero sí abrasiones superficiales y contusiones en el muslo derecho”, fue el parte médico del equipo entregado el sábado antes de la octava etapa.

Además, el equipo reconoció que este domingo hubiera salvado la etapa. “Buitrago se mantuvo a salvo, aún recuperándose del accidente del viernes. Mañana tendrá lugar la primera prueba de escalada real de este año”.

Llega la montaña antes del descanso

Este lunes se correrá la etapa 10 entre Ennezat y Le Mont-Dore, un recorrido de 165,3 kilómetros con un desnivel de 4.450 metros y ocho puertos de montaña (7 de segunda categoría y 1 de tercera).

Los ciclistas tendrán que superar estas subidas que tienen en promedio 5,7% a 7.4% de inclinación. La más larga y exigente será la que suban a Charade en el kilómetro 66, una distancia de 5.1 km al 7.4%. La llegada a Le Mont-Dore también será complicada al estar al 8%, serán 3.3 km que los corredores deberán superar antes de cruzar la línea de meta.

El martes será el primer día de descanso en el Tour, los ciclistas llegarán a Toulouse para vivir el primer día sin actividad en la competencia, más allá de la preparación y recuperación que hace cada equipo con los participantes. Buitrago está ansioso por esa jornada para volver con más energía a lo que será la segunda semana del Tour.

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