Inglaterra, un rival para jugar mano a mano y buscar la semifinal
“Vamos a jugar de tú a tú, no vamos a especular”, dijo Catalina Usme y la Selección está convencida de hacerlo. El fútbol es de momentos y Colombia quiere aprovechar el suyo.
“Lo esencial es no perder la orientación”, reza una de las frases de Cien años de soledad, la novela de Gabriel García Márquez que aunque nada tiene que ver con fútbol. Hoy invita a aferrarse a ella en la previa de un partido (sábado 12 de agosto, 5:30 a.m.) que servirá para seguir creyendo en este grupo de jugadoras, quienes desde el comienzo se fijaron como objetivo venir a un lugar tan lejano a disputar 7 juegos y soñar con el título.
La Selección por historia no es más que Inglaterra, pero por presente está en la capacidad de jugarles mano a mano y en la cancha demostrar que para llegar a la final hay que superar a cualquiera. Desde las estadísticas se demuestra que hay una superioridad por parte de Inglaterra a nivel de pases acertados (2248 vs. 1070), remates al arco (25 vs. 16) y goles marcados (8 vs. 5). Pero eso no implica que desde el juego sean mejores.
Las colombianas saben que será un duelo muy físico donde el orden atrás y el desorden para ir al ataque servirán para enredar a un equipo que si bien tiene mucho la posesión, por momentos se queda sin ideas y sufre sin la pelota. Las inglesas también apuestan por el juego vertical buscando romper bloques defensivos a partir de la potencia y físico de sus atacantes.
Colombia y un plan similar al de Alemania
La Selección dependerá de su técnica y combatividad para imponerse ante el equipo de Sarina Wiegman. La posesión seguramente como en el juego ante las Alemanas será para las europeas, pero Colombia deberá estar atenta para aprovechar cada situación de gol que genere. La efectividad será muy importante para eso. Rematar de media distancia también servirá como alternativa. Además, cuando les quitan la pelota se ven muy incómodas (Nigeria lo demostró).
El mediocampo volverá a ser fundamental para imponerse con Lorena Bedoya y seguramente el regreso de Daniela Montoya. El trabajo por las bandas de Manuela Vanegas y Carolina Arias para evitar que puedan centrar facilitará lo defensivo (de las 8 selecciones que quedan, Inglaterra es la tercera que más tiene con 99 centros, por debajo de España 164 y Francia 125).
Mayra y una oportunidad para marcar su primer gol en el Mundial
A la 9 de la Selección nada se le reprocha pese a que aún no ha podido hacer gol. Sacrificio y fútbol para ser la que hasta ahora tiene más recepciones de pase entre las defensas y el mediocampo rival (111). Su juego es clave para Colombia, el despliegue físico que tiene para jugar por el centro o el costado derecho del campo la convierten en una seria dificultad para las defensas rivales.
Inglaterra desde lo físico parece más fuerte que Alemania, pero Mayra sabe proteger muy bien la pelota y cuando lanzarla adelante para ganar en el mano a mano. La puntería es lo que le ha faltado, pero su potencia ha hecho que abra espacios y distraiga marcas para que desde atrás puedan llegar otras jugadoras. Como ocurrió ante Jamaica donde acompañó la jugada por izquierda para que por derecha quedara sola Catalina con Blackwood que no pudo rechazar la pelota y terminó en el gol de la clasificación.
Y volviendo a la frase del comienzo, lo más importante será no perder el foco del objetivo para evitar la desesperación, jugar un partido inteligente y definir las que se puedan generar. Sídney será otra vez Colombia en las tribunas para dar un empujón más a este equipo que sigue haciendo historia.