Diego Torres: “Demandamos a Guerra por terminar un contrato vigente”
El exrepresentante del extremo contó detalles sobre la finalización de su vínculo laboral. “Los jugadores jóvenes piensan que por correr se llega primero”.
La novela de Edgar Guerra parece estar lejos de terminar. El extremo, de gran inicio en el semestre, no ha llegado a un acuerdo para renovar con Millonarios y, de momento, no será tenido en cuenta para los próximos compromisos. Diego Torres, exrepresentante del jugador, habló con El Alargue de Caracol Radio sobre esta situación y contó los detalles sobre la finalización del vínculo laboral.
“El argumentó en la carta que por justa causa daba por terminado el contrato. Son las autoridades las que deberán fallar al respecto”, contó Torres sobre la demanda impuesta al jugador. Además, comentó que, a pesar del buen momento deportivo que vive en este inicio del año, el futbolista debe tener calma y ser bien aconsejado por su entorno.
¿Qué pasó con Edgar Guerra?: “Más allá del distanciamiento que se produjo con Edgar Guerra, que terminó en la aclaración que hice en horas de la mañana, buscando proteger un poco el nombre, que no se enlode el trabajo que se viene haciendo de manera sistemática y bien hecho. Como informé, desafortunadamente él ya no hace parte de nuestra agencia, ni trabaja con nosotros. Las razones por las que se acabó el contrato es porque él decidió de manera unilateral darlo por terminado y ya serán las autoridades las que definan el final de este hecho”.
¿Cuánto le faltaba para terminar el contrato con ustedes?: “Le faltaba un año, un año y medio, pero más allá de eso, nosotros fuimos las personas que en su inicio en Millonarios ayudamos a construir esa llegada y esa suscripción del primer contrato laboral, de la mejor manera, por la institución, con sus directivos, con el doctor Camacho, con el doctor Serpa, con quienes nos une una relación profesional y un respeto importante con la institución y, desde luego, con las personas. Están en todo el derecho los deportistas de tomar ese tipo de decisiones y, bueno, había que seguir adelante. Más allá del tema de Guerra es cómo crear un ambiente profesional, sano y transparente, y con categoría humana, entre los diferentes autores que confluyen en la negociación del contrato laboral de los deportistas, para que sin egos que muchas veces se ponen sobre la mesa, que no son necesarios, se puedan alcanzar esos objetivos comunes entre la institución, los jugadores, la dirección deportiva, el cuerpo técnico y, desde luego, las personas que acompañan a los jugadores. Los jugadores jóvenes a veces se aceleran y piensan que se siembra y al otro día se cosecha y, bueno, toman decisiones”.
¿Cómo avanza la demanda contra Edgar Guerra?: “Es un tema que, yo soy abogado, pero trabajo con un grupo de profesionales que están a mi lado y son los que llevan adelante ese asunto. Digamos que, por respeto y por prudencia, serán las autoridades las que en su momento se pronuncien al respecto”.
El motivo de la demanda: “El argumentó en la carta que por justa causa daba por terminado el contrato. Son las autoridades las que deberán fallar al respecto, en el diseño y la construcción de la carrera deportiva de los jóvenes talentos debe haber responsabilidad, esto exige preparación, conocimiento, pero sobre todo confianza entre las partes. Los jugadores jóvenes piensan que por correr se llega primero y yo siempre aconsejo que es mejor subir las escaleras de una en una para no estrellarse. Es necesaria la preparación del jugador, de la familia, de la gente que está al rededor. Seguramente en algún momento alguien le propuso algo distinto y lo tiene en esta situación que lamento mucho”.
¿Cómo analiza la situación desde lo personal?: “Se debe generar conciencia de que es posible, en el fútbol y también en el fútbol colombiano, hacer las cosas de manera profesional, hacer las cosas de una manera sistemática, de una manera estructurada. Son proyectos de vida y seres humanos los que están detrás, esto requiere tiempo, paciencia y medir, en el corto, mediano y largo plazo, los objetivos que se proponen cuando se trabaja en equipo. Más allá de ir en contra de este jugador, que en ningún momento se busca, lo que genera tanto revuelo es que tuve que salir a aclarar que no era yo el que estaba entorpeciendo las negociaciones con Millonarios porque se había regado mediáticamente que de pronto era yo la persona detrás. Trabajar en la construcción para que haya gente profesional, la industria así lo exige para que acompañen a estos seres humanos en la consecución de estos objetivos. En mi caso, tengo un respeto infinito por Millonarios, no solo por su historia donde estuvo Pedernera, Rossi, Di Stéfano. También por su presente, lo bien que lo han hecho los directivos, demostrando que los procesos dan resultado. Tuve la oportunidad de jugar desde la infantil hasta marcas teniendo como entrenadores a Delio Maravilla Gamboa, Eduardo Guilio, Néstor Piza, Miguel Monroy y de compañeros a Andrés Chitiva, entre otros. Es una institución que está haciendo las cosas bien. Finalmente, considero que hay que llevar las cosas con calma, el dinero tiene que ser consecuencia del trabajo y de un proceso, no salir a buscar el dinero sin darse ese espacio de trabajarlo”.
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