Cataño y la final contra Nacional: “Era un partido complejo para mí”

El fútbol siempre da revancha, capítulo un millón. A mediados de 2022, Daniel Cataño falló un penal clave y fue expulsado en la final de Liga BetPlay entre Deportes Tolima y Atlético Nacional. Recibió críticas y amenazas, pero un año después, dio vuelta a la historia. En el pasado mes de julio, fue protagonista del título más importante de Millonarios en el FPC, justamente, contra el Verde de Antioquia.

“Con mucha alegría por todo lo que había pasado. Tuvo un valor muy especial para mí este título. La celebración fue con mi familia, con el club, porque a los dos días ya emprendíamos un viaje por Sudamericana. Nos marcó muchísimo a todos, hicimos un gran grupo, una gran familia. El poder salir campeones fue el premio para un proceso que llevaba muchos años. Es muy bonito haber hecho parte de esa historia”, comentó Cataño sobre la reciente final en entrevista con Salomé Fajardo para Diario AS Colombia.

El volante recordó paso a paso la histórica consagración con Millonarios: La previa, las charlas con los compañeros, el partido, la tensión de los penales... Por otro lado, aunque reconoció que está “feliz y agradecido” con el equipo bogotano, no ocultó su ilusión de jugar en el exterior. Y finalmente, se refirió a la agresión que sufrió en el estadio Manuel Murillo Toro de Ibagué a principios de este año.

La final contra Atlético Nacional: Una revancha personal

Por lo sucedido antes con Tolima, la final vs. Nacional fue una revancha: “Sí, claro, fue muy bonito. Yo tenía mucha fe que lo podía conseguir, pero era un partido muy complejo para mí. Sentí muchas cosas. Nosotros sentimos cualquier cantidad de pensamientos, pero que haya sido contra Nacional y poder ganarla, fue algo muy bonito por todo lo que había pasado, por lo que se había especulado en Ibagué.

Uno queda muy triste que pongan en tela de juicio el profesionalismo de uno, es lo que más lo hiere y rabia da. Un penalti o una situación desafortunada, cualquier jugador la puede tener. Yo siempre he sido un profesional, de ningún equipo han tenido una queja de mí”.

¿Pensó que se podía perder? “Uno siente porque somos seres humanos. Quizás nos pasaron cualquier cantidad de pensamientos. Pero hay algo muy bonito y es que, como grupo, en cada concentración, nos reuníamos después de la cena, en una habitación y orábamos juntos, compartíamos la palabra. Íbamos encaminados a lo mismo (…) En el partido y en los penales, nosotros decíamos: ‘está escrito, es para nosotros, no deje de creer, no dude’. Nos empezamos a decir campeones. Todo este tipo de cosas activan la fe y confianza”.

Los penales y la expectativa de si cobraba: “Obviamente los habíamos practicado, yo lo seguí practicando. En un partido de fútbol, en una final podría pasar que me tocara patear. Yo me acerco al profe y le digo, ‘¿quiénes vamos a cobrar o quiénes van a cobrar?’. En la lista no me animé en los 5 primeros, yo quedé como de séptimo para cobrar, pero llegó un momento que ya es decidir. Había un compañero que no se sentía bien para cobrar. Dije, ‘no, tranquilo, que si toca cobrar el siguiente, yo lo cobro’… Si me hubiera tocado patear, yo hubiera pateado, cómo, no sé”.

El penal de Jarlan Barrera: “Jarlan es un jugador muy importante, es un crack, lo admiro. Cuando yo boté el penal en Ibagué, él me envió un mensaje de fuerza. A mí me tocó después decirle: ‘manito, ahora me toca mandarte el mensaje, para adelante que no pasa nada, mire yo donde estoy’. Nosotros tratamos de acobijarnos porque le puede pasar a cualquiera. Jarlan tiene una lamparita, aparecen en momento decisivos e importantes. Era un jugador importante para Nacional, pero también teníamos a Álvaro (Montero) y lo que mide ese muchacho”.

La anécdota con Andrés Llinás: “Con Llinás tengo una historia porque tiene un corazón muy bonito. Llinás era un compañero que no creía mucho, es muy puesta en su lugar, pero nunca dejó de ir a ningún grupo de oración con nosotros. Siempre iba y nos acompañaba. Una vez yo estaba orando y estoy hablando con él y lo empezamos a molestar. Yo le dije: ‘vas a hacer el gol de título, el gol más importante’. Y no hizo uno, hizo dos muy importantes”.

Su presente en Millonarios y el sueño de jugar en el exterior

Rumores de ofertas y salida: “Este es nuestro trabajo y nosotros vivimos de esto. Yo estoy feliz en Millonarios, agradecido con Millonarios. Cuando renové faltando casi 4 meses, fácilmente hubiera podido esperar y mirar qué hacía. Me siento feliz, me han acogido muy bien, me abrieron las puertas. Yo estoy muy feliz, pero este es nuestro trabajo y sueño y anhelo algún día jugar en el fútbol internacional. Nunca la he tenido, trabajo para eso, para que mi familia mejore, que el futuro de ellos pueda ser diferente. Hubo acercamiento, no directamente conmigo, con mi representante. Cuando ya sea algo fijo, real, que me digan porque mientras tanto quiero estar enfocado en lo que es Millonarios”.

Renovación de Gamero: “A uno le gustaría que renovara ligero, pero me imagino que tiene sus expectativas, sueños y anhelos. Son cosas respetables. Yo creo que va a terminar renovando, ahora estará enfocado en otras cosas. Ojalá lo haga porque se lo merece, ha hecho cosas muy buenas. Ahora lo que le queda es recorrido y camino, que tome la mejor decisión”.

La triple D con Daniel Ruiz y David Mackalister Silva: “Suena bacano, a mí me gusta. Por ahí lo empiezan a uno a etiquetar, suena bonito, es chévere. Cuando en el Real Madrid empezaron a salir todas esas siglas, pero tenemos tantos jugadores y había que cambiarla por otras letras”.

El pase de Daniel Ruiz en el último clásico ante Nacional: “Ya habíamos estudiando a Nacional. Yo no soy extremo, pero me he ido acondicionando, no es una posición fácil y menos para un 10. He aprendido a jugar por derecha, izquierda, en el DIM jugué por banda y a mí me gusta y me siento cómodo. Me toca ser inteligente en desplazamiento y eso. Cuando Nacional se equivoca y Daniel empieza a avanzar, yo piso el área, ahí le queda a uno el balón. Dani tira un centro espectacular. Cuando vamos celebrando le doy las gracias y le digo que yo cabeceaba mucho. Nos reíamos con lo que dijimos ahí”.

Lo sucedido con un hincha de Tolima en Ibagué

En qué quedó el tema judicial: “Tuve el acercamiento con esta persona, se trató, se tenía que llegar a una conciliación, pero no se logró porque había temas de clubes y la administración y alcaldía me habían puesto una demanda… Como teníamos esta cosa por la alcaldía no se concilió. Resulta que este joven me dice que, si no conciliamos, me demanda por lesiones personales y así lo hizo. Luego se hizo el primer llamado y no pude asistir por un partido y en eso está la demanda con esta persona.

Con la alcaldía nunca se dio nada, nunca me citaron, no me llegó citación. Pedimos los videos de cómo ellos llegaron al camerino, eso no ha trascendido, esperemos que se quede así, eso ya pasó, yo estoy en Millonarios y en Bogotá”.