Dos de las acciones más polémicas de la 23ª jornada de LaLiga Santander fueron los fueras de juego de Griezmann y Mendy. Ambos muy justos. Pero el VAR acertó en señarlos e invalidar los goles de Messi y del madridista.

Pese al cabreo de Koeman y del Barcelona, que consideran que debió ser legal el tanto de Messi porque consideran que no existió fuera de juego, el VAR tenía la prueba y la evidencia de que sí existía. Aunque la imagen emitida en televisión mostraba que era muy justo y apenas se apreciaba. Ese fue el único error del VAR, no enviar a la señal de televisión una toma con zoom sobre el fuera de juego para que los aficionados lo apreciasen mejor. Esa es la directriz del Comité Arbitral, imitar al tenis y enviar más de cerca la acción una vez trazadas las líneas. En el caso del fuera de juego de Mendy, el propio VAR mandó la imagen sin la línea del jugador madridista, para que se apreciase más limpia la toma.

Respecto al debate sobre engordar las líneas que se trazan para no corregir al árbitro en caso de que se monten una sobre otra, explican a AS que dichas líneas no tienen un grosor determinado. Dependen del tipo de cámara que haya capturado la acción y del tipo de plano. Todas las tomas sirven para trazar el fuero de juego.