Rigoberto Urán gana el pulso a Adam Yates y Aru en Superga
El colombiano se llevó la Milán-Turín, la decana de las clásicas italianas, en una última ascensión en la que superó a Adam Yates y Fabio Aru.
La última ascensión a la Basílica de Superga decidió la Milán-Turín, la decana de las clásicas italianas, y ahí el colombiano Rigoberto Urán demostró que era el más fuerte... o el que mejor supo jugar sus cartas. El colombiano del Cannondale, que reemplaza a Miguel Ángel López, campeón el año pasado, atacó en el momento justo, a 2 km para el final, y se marchó en solitario midiendo sus fuerzas para acabar levantando los brazos, unos metros por delante del británico Adam Yates, el que más cerca estuvo de alcanzarlo. Fabio Aru, que no pudo rematar el trabajo del Astana, completó el podio.
Superga se subía dos veces en los últimos 23 km. En la primera ascensión, fue el Movistar el que se mostró más ofensivo, con intentos de Dayer Quintana y Winner Anacona, preparando el terreno a un Nairo que se dejaba ver en las primeras posiciones. Anacona propició que se formara un grupo por delante junto a Diego Rosa (Sky), Taaramae (Katusha), Gaudu (FDJ)... y un Alaphilippe que no se conformaba con rodar en compañía y se lanzaba en solitario a poco de coronar.
A pesar de que el francés se la jugó en la bajada, el grupo, otra vez unido, le dio alcance. Era el Astana, con Luis León al frente, el que más trabajaba en la aproximación en favor de Aru, otro al que se le veía muy atento. Y delante estuvo cuando, ya en la última ascensión, Molard (FDJ) lanzaba el primer gran ataque y rompía el grupo. Por detrás reaccionaban Urán y Egan Bernal, el joven colombiano del Androni (fichado para 2018 por Sky), y también se vio a Gaudu, la gran promesa francesa.
Precisamente un hachazo del joven francés fue el que lanzó a Urán a la victoria. El del Cannondale cogía su rueda y aceleraba cuando notó cierta debilidad en su compañero en la cabeza. Con dos kilómetros por delante, el segundo del Tour se encontró solo, teniendo que dosificar su renta. Algo que, cuando ya se subía de uno en uno, a punto estuvo de hacer Adam Yates (Orica), segundo, mientras que Fabio Aru completaba el podio justo por delante de Nairo Quintana, que demostró sentirse bien y acabó cerca de entrar en el cajón.