Nacional hace los goles que pedía Lillo; el sábado clásico

Fue el inicio soñado. Un gol de Dayro Moreno al minuto tres y un panorama que anunciaba goleada. Ni el arquero Pier Graziani y el campo muy afectado por la fuerte lluvia que cayó en Medellín, pudieron evitar que Atlético Nacional redondeara su presentación con goles, esos que le habían sido esquivos y que llegaron en el triunfo 4-0 sobre Alianza Petrolera. 

Se tardaron en llegar en la era Lillo y en el mismo partido de la novena fecha de la Liga II-2017, pues fue a partir del minuto 79 que el campeón pudo liberarse de la falta de eficacia, para registrar anotaciones bien concebidos por Steven Lucumí (79’), Luis Carlos Ruiz (87’) y Juan Pablo Nieto (92’). 

Así como ante América, los de Lillo se repusieron a las condiciones de la cancha para hacer un juego aceptable para el público, en el que los aurinegros estuvieron lejos de ese equipo que le remontó a Pasto la jornada anterior. Apenas consiguió desequilibrar con Estefan Arango, el gestor de la mejor jugada del visitante que no finalizó en gol porque Armani ganó el pulso con Diego Barreto. 

Pero esa acción fue una simple ilusión, pese a que la escuadra de Jorge Luis Bernal intentó pelear el partido, recuperar el balón y liberarse de la presión de Nacional, que con ese tanto de Dayro, cazando un rebote tras un remate de Ruiz, manejó los tiempo de compromiso y neutralizó cualquier tibio asoma del visitante. 

Con el equipo que paró Lillo, que fue más allá de ajustar con Gorka, Bocanegra y Cuesta, el fútbol por momentos fluyó bajo la guía de Nieto, que alimentó el fútbol interno y estuvo a la altura del reto de reemplazar a Macnelly Torres, reservado para el clásico paisa y para el compromiso en Copa Águila. 

La película de los verdolagas por gran parte del partido se repitió. Dominio total, las mejores opciones y el arco cerrado. Tuvo chances claros con Ruiz, Dayro y Gorka, la mayoría de ellos hechos en descolgadas de Daniel Bocanegra, que siempre que se sumó al ataque creo peligro. 

Pero Nacional dejó de ser un “equipo ofensivo inofensivo” después que Armani le atajó un opción clara a César Arias, una especie de campanazo que llevó a los jugadores a evitar poner en riesgo el triunfo. Ahí, con la media distancia de Lucumí, en un auténtico golazo, su primer con verdolaga, se destrabó por completo el partido. 

En cuestión de segundos, el campeón puso las cosas en su lugar para hacer justicia con las anotaciones de Ruiz y Nieto en el cierre del juego, un verdadero bálsamo para la era Lillo, que si bien tiene al equipo tercero con 19 puntos, necesitaba de esta contundencia para sellar sin asomo de dudas la victorias con el nuevo estilo de juego. 

Ahora se ocupará del juego de ida de los cuartos de final de la Copa Águila ante Patriotas, para después medirse con Independiente Medellín en la jornada de clásicos. Por su parte, Alianza chocará con Bucaramanga, juego al que llega sexto con 14 puntos.