Márquez es precavido: "No hay que confiarse"
Volver con 48 y 59 puntos de ventaja sobre Lorenzo y Rossi da confianza al ilerdense, pero no va a permitirse relajarse en exceso.
Volver de vacaciones y subirse a la moto con 48 y 59 puntos de ventaja sobre tus más inmediatos perseguidores te da una tranquilidad que puede volverse en tu contra. Una distancia tan grande puede llevarte a una confianza excesiva que es lo que quiere evitar a toda costa Marc Márquez. El ilerdense ha dirigido fantásticamente su camino hacia el tercer título de MotoGP, pero sabe que en las nueve carreras restantes puede ocurrir lo contrario y tener más cerca a Lorenzo y Rossi.
"Tal vez en esta parte del campeonato no he sido el piloto más rápido en la pista, pero he sido el más consistente, todo lo contrario que el año pasado. Así que estoy muy feliz", declara en ‘Autosport’ recordando las tres caídas que sufrió en 2015 a estas alturas de temporada, y prosigue: "Pero no podemos olvidar que la segunda parte de la temporada será dura. Cuando lideras con este margen tienes confianza, pero hay que tener cuidado de no confiarse demasiado".
De hecho, sabe bien el precio que se paga con ello. Hace dos años se dejó casi 50 puntos en la parte final, aunque su ventaja era enorme: "En 2014 estaba líder con una gran cantidad de puntos, más que ahora (98), pero me caí en dos carreras seguidas (Misano y Aragón) y perdí 50 puntos. Así que hay que tener cuidado porque estamos justo en el medio de la temporada, lo que pase desde ahora puede ser todo lo contrario. Habrá más carreras en condiciones mojadas y hay que gestionarlas bien".
El ilerdense ha aprendido a ser más paciente y a gestionar mejor las carreras tras su flojo 2015. "Cuando estás en la moto es difícil pensar en ello, pero cuando estás en casa es mucho mejor para analizar la temporada y tus errores. Debes escuchar a las personas que te rodean, y la gente de mi entorno y de Honda me dan buenos consejos que trato de seguir. Incluso si ganas el Mundial dos veces es mejor escuchar a los demás y tratar de aprender", concluye. Saber escuchar también es propio de los campeones.