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JUSTICIA

Salvatore Mancuso, de regreso a Colombia: ¿Por qué vuelve al país y qué le espera?

Tras su llegada, el exjefe paramilitar será trasladado al pabellón de extraditables de máxima seguridad de La Picota. En este momento, Mancuso podría ser expulsado de Justicia y Paz.

Actualizado a
El exjefe paramilitar Salvatore Mansuo envió recientemente una carta al candidato Gustavo Petro pidiendo ayuda
Colprensa

Este 27 de febrero, el exjefe paramilitar, Salvatore Mancuso Gómez, regresará a Colombia en calidad de deportado tras cumplir una condena de 16 años en Estados Unidos por el delito de narcotráfico. El hombre de 59 años, que llegará a la capital del país hacia las 3:00 de la tarde, deberá responder ante la justicia colombiana por el asesinato del exdecano de la Universidad del Magdalena, Roque Alfonso Morelli Zarate.

El exjefe paramilitar, que viajará en un vuelo comercial con más de 100 migrantes, será capturado una vez el avión aterrice en el Aeropuerto Internacional El Dorado: deberá pagar 40 años de prisión en Colombia por los delitos de homicidio y desaparición forzada y, además, tiene abiertas alrededor de 750 investigaciones judiciales, por lo que será reclutado en la cárcel La Picota en Bogotá.

¿Mancuso podría quedar en libertad?

Pese a que el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) estaría a cargo de la custodia de Mancuso, quien será trasladado al pabellón de extraditables de máxima seguridad de La Picota, se presume que el exjefe militar podría quedar en libertad a partir del próximo viernes 1 de marzo para que desarrolle sus labores como gestor de paz, pues el Gobierno de Gustavo Petro le designó esta función para que facilite las negociaciones con el Clan del Golfo.

Sin embargo, su eventual libertad sería definida por Justicia y Paz, pues los procesos que lleva con la justicia ordinaria tampoco podrán verse afectados por su regreso al país ni por el nombramiento realizado por Petro: Mancuso fue acusado por lavado de activos y concierto para delinquir después de su desmovilización con las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).

Y, en caso de comprobarse su incidencia en estos delitos después de su dejación de armas, sería expulsado de Justicia y Paz y podría perder el beneficio de reducción de pena a ocho años. Por ahora, las funciones de Mancuso como gestor de paz no están claras, pues los grupos paramilitares que se sumaron a las conversaciones de paz con el gobierno del expresidente Álvaro Uribe Vélez son distintos a las organizaciones paramilitares que operan actualmente en el país.

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