Caracol Radio
NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

JUDICIAL

¿Quién es Mario Montoya, el General imputado por la JEP por falsos positivos?

Al exmilitar se le acusa por ser el responsable de alrededor de 130 ejecuciones extrajudiciales en el oriente antioqueño.

Actualizado a
General (r) Mario Montoya
JEP Oficial

Este miércoles 30 de agosto, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) imputó al general (r) Mario Montoya el título de autor crímenes de guerra y de lesa humanidad, por mentir sobre el número de bajas, encubrir casos de extralimitación del uso de fuerza, presionar a los miembros de las unidades militares bajo su mando para obtener bajas en combate.

Según la Sala de Reconocimiento de Verdad y Responsabilidad, la decisión contra el excomandante del Ejército Nacional se da por 130 asesinatos y desapariciones forzadas cometidos cuando el oficial fue comandante de la IV Brigada, con sede en Medellín, entre los periodos del 2002 y 2003.

La jurisdicción señaló que por los mismo crímenes fueron imputados los tenientes coroneles (r) Julio Alberto Novoa e Iván Darío Pineda Recuero, además de cuatro subtenientes, un teniente y un soldado regular, todos antiguos integrantes del Batallón de Infantería No. 4 ‘Jorge Eduardo Sánchez’ (BAJES) y retirados de la institución.

La imputación del excomandante de la IV Brigada y de los dos excomandantes del BAJES se sustenta, en parte en la presión que cada uno de ellos ejerció por bajas en combate. Una práctica que replicó a lo largo de toda la cadena de mando militar, hasta constituir el punto de partida del patrón macrociminal de asesinatos y desapariciones presentadas ilegalmente como bajas en combate”, sentenció la Sala de Reconocimiento de Verdad.

JEP llamó a reconocer la responsabilidad del general (r) Mario Montoya

La Jurisdicción Especial para la Paz, llamó a reconocer la responsabilidad del general (r) a título de autor, “al haber creado dolosamente, como garante institucional, un riesgo jurídicamente desaprobado para la población civil en la zona operada”.

Con base en lo anterior, la Sala determinó que como comandante de la IV Brigada, “Montoya mintió sobre la producción de bajas pertenecientes a la Farc-EP y se mostró dispuesto a encubrir posibles casos de extralimitación en el uso de la fuerza”. Asimismo, el general (r) Montoya “presionó a los miembros de las unidades militares adscritas a la IV Brigada, midiéndolos, comparándolos e intimidándolos, para que produjeran bajas a toda costa”.

Además, empleó constantemente un lenguaje violento que exaltaba el derramamiento de sangre e incitaba al uso indiscriminado de la fuerza letal y “rechazó el reporte de capturas, incautaciones y otros resultados operacionales distintos de las bajas, considerándolas resultados operacionales indeseados”.