Las 5 formas de recuperar el empleo perdido tras la pandemia en Bogotá
Un reciente estudio propone estrategias para generar más empleo para jóvenes y mujeres.
La pandemia del covid-19 no solo afectó la salud de muchas colombianos, sino también perjudicó la estabilidad económica y laboral de estos. Muchas ciudades sufrieron crisis agudas en sus indicadores económicos, siendo Bogotá una de las ciudades más afectadas en el país.
Según el Dane, para el año 2019 la tasa de desempleo de la capital cerró en un 10,9%. Pero al año siguiente, 2020, año del inicio y consolidación de la pandemia, la cifra de desempleo en la capital aumentó a un 17,9%. Cifra que se mantuvo en el año 2021 y que produjo que Bogotá cerrara ese año en la cuarta plaza dentro de las ciudades con mayor índice de desempleo del país, por debajo de Montería, Cúcuta e Ibagué.
Otro estudio titulado: ‘Convirtiendo a Bogotá en ciudad líder para la generación de empleo formal’, realizado por Probogotá y la Anif (Asociación Nacional de Instituciones Financieras), sugiere que la pandemia al afectar laboralmente a los bogotanos supuso un detrimento en el ingreso de los hogares capitalinos. Se estima que entre enero de 2020 a 2021 hubo perdidas de 11,8 billones de pesos.
El estudio también establece que la cifra de personas ocupadas aún no alcanza los niveles de prepandemia, es más, sectores que se esperaban fueran generadores de trabajo, como: comercio, hotelería y restaurantes, no han tenido la recuperación económica esperada. Por ejemplo, en los tres últimos meses del año 2021, frente a los mismos meses del 2020, solo se crearon 3000 empleos.
La inactividad es otro de los grandes retos de la capital, en diciembre de 2019 eran alrededor de 2 millones de personas sin actividad y para el cierre de 2021 se llegó a 2,5 millones.
Cinco formas para recuperar el índice de empleo
- El estudio realizado por Probogotá y Anif sugiere que el Estado garantice la protección social a los ciudadanos sin importar si están en el sector formal e informal.
- Las propuestas laborales se deberían implementar gradualmente, entre las mujeres y jóvenes entre 18 y 25 años, quienes son los dos grupos poblacionales más afectados por el desempleo.
- Se plantea que jóvenes y mujeres entre 18 y 25 años se formen según las necesidades de los empresarios locales -educación técnica y tecnológica- y bilingüismo.
- El salario mínimo debe corresponder a las realidades en regiones, y que la contratación y cotización sea por horas, ya que el trabajo por horas es una realidad en el país.
- Se plantea la creación de incentivos tributarios. Es decir, que los parafiscales se puedan descontar del impuesto de renta y subsidios para los empleadores de mujeres y jóvenes.