Hace una jornada de 5 horas en Transmilenio y podría ganar hasta 3.800.000 pesos: tiene un talento que pocos poseen

Bogotá es escenario de miles de historias de rebusque, pero pocas sorprenden tanto como la de Jorge Andrés, un joven que decidió llevar su talento musical al sistema de transporte masivo. Con guitarra en mano y voz afinada, convierte cada vagón del TransMilenio en un escenario improvisado y, al mismo tiempo, en la forma de ayudar con la economía de su casa.

Su rutina comienza a media mañana. A las 10:48 a.m., según muestra en sus redes sociales, inicia su recorrido por estaciones y buses del sistema, pasando por puntos como Perdomo, Universidad Nacional o Santa Isabel. En cada parada, interpreta canciones que logran lo impensado: transformar la cotidianidad del viaje y, de paso, generar un ingreso que, de ser diario, sería una cifra sorprendente.

En una jornada de cinco horas, el joven logra reunir una cantidad nada despreciable. En un conteo que realizó recientemente en sus redes sociales, reveló que, ese día, logró $60.000 en billetes y $64.550 en monedas, sumando un total de $124.550. Si esta cifra se replicara a diario, sus ganancias mensuales superarían los $3.800.000, según los cálculos de uno de sus seguidores, una suma que incluso rebasa lo que reciben numerosos profesionales en empleos formales de tiempo completo.

Entre talento, viralidad y crítica social

El artista no sólo canta en buses, también busca espacios en restaurantes de barrio donde continúa presentaciones improvisadas. Este modelo de rebusque le permite ampliar su público y darle mayor estabilidad a sus ingresos. Su historia, publicada en TikTok, se viralizó rápidamente y ya acumula miles de visualizaciones y comentarios.

Las reacciones en redes sociales han sido diversas. Muchos usuarios aplaudieron su disciplina y talento, resaltando la capacidad de transformar billetes y monedas en apoyo familiar. “Un billete de diez, que es común para nosotros, para él es una bendición”, escribió un internauta. Otros, sin embargo, cuestionaron la informalidad del trabajo y lo compararon con las dificultades del mercado laboral en Colombia.

Para Jorge, el dinero es solo parte de la motivación. “¡Estoy muy feliz, muchachos! Esa plata se la voy a dar a mi mamá, para ayudar aquí en la casa”, dijo en uno de sus videos, mostrando el momento en que entregaba el dinero a su madre, quien lo recibió con orgullo y lágrimas en los ojos.

Recientemente y debido a las críticas, Jorge aseguró que no siempre recibe la misma cantidad de dinero y que no todos los días puede cantar, pues el uso frecuente de su voz causa desgaste y, en algunos momentos, debe parar. “La gente cree que ya soy millonario sólo porque un día me fue bien”, dijo.

Hoy, Jorge Andrés, conocido en redes como @Georgito_000, supera los 21.300 seguidores en TikTok, donde comparte su rutina, sus canciones y el esfuerzo diario por salir adelante. Su historia refleja el contraste entre la precariedad laboral y la creatividad de quienes encuentran en el arte una alternativa de vida en Bogotá.

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