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Día de los Santos Difuntos en Colombia: Origen, significado y cuándo es festivo

A través de esta festividad religiosa, la comunidad católica intercede por las almas de las personas que han fallecido pero que, sin embargo, no han ingresado al Reino de los Cielos.

Matias ChiofaloEuropa Press

A propósito de la conmemoración del Día de los Santos Difuntos, el próximo lunes 6 de noviembre será festivo en Colombia, pues esta celebración de la Iglesia Católica es conmemorada por los feligreses el 2 de noviembre de cada año. Sin embargo, dado que la festividad cae un martes, el Congreso de la República demuestra que el feriado es aplazado al lunes siguiente.

De hecho, de acuerdo con la Ley 51 de 1983, “cuando [las festividades] no caigan en día lunes se trasladarán al lunes siguiente a dicho día. Cuando las mencionadas festividades caigan en domingo el descanso remunerado igualmente se trasladará al lunes. Además, las prestaciones y derechos que para el trabajador origina el trabajo en los días festivos, se reconocerán en relación al día de descanso remunerado establecido en el inciso anterior”.

Por lo tanto, aunque los empleados que estén vinculados laboralmente a una compañía no están obligados a asistir a sus lugares de trabajo, deberán recibir una remuneración correspondiente a su descanso sin excepciones: los empleadores no podrán realizar un descuento por faltar a la empresa, por lo que el pago de los días feriados se liquida del mismo modo que un descanso dominical.

¿Qué es el Día de los Santos Difuntos?

Este miércoles 1 de noviembre, la Iglesia Católica conmemora el Día de Todos los Santos, una fiesta en la que se conmemora a todas las almas que superaron el purgatorio y, por lo tanto, se han santificado totalmente, obteniendo la visión beatífica. Al día siguiente, sin embargo, los feligreses conmemoran el Día de los Fieles Difuntos, una fecha relevante en el calendario eclesiástico en el que se llevan a cabo oraciones por los fieles que han fallecido en el plano terrenal.

Esta festividad religiosa, que fue introducida por el monje benedictino San Odilón de Francia en el año 998, fue adoptada en Roma en el siglo XVI y tiene el objetivo de ofrecer rezos y eucaristías en nombre de las personas que han fallecido pero que no han sido limpiadas de los pecados veniales, lo cual no les permite alcanzar la visión beatífica. De modo que las oraciones ofrecidas tienen la misión de interceder para que las almas entren al Reino de los Cielos.

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