Una vez más fue un jugador influyente. Mateus Uribe no solo apareció por primera vez como capitán, sino que se hizo cargo de la responsabilidad que tenía el grupo alterno en el duelo con Envigado, que significó con el triunfo 2-0 la clasificación de Atlético Nacional a los play-offs de la Liga I-2017 al llegar a 32 puntos, con siete fechas por disputar y un juego pendiente. Esta vez, el paisa apareció como pareja de Elkin Blanco en la primera línea de volantes. Hizo su labor y le agregó a eso una anotación que le permitió al cuadro verde lidiar más tranquilo con el partido que le planteó el cuadro naranja en el Atanasio Girardot. "Estoy contento por el gran trabajo del equipo. Línea por línea se paró muy bien en el campo y sacó un resultado importante. En el gol, el balón queda picando y me da para empalmarla cruzada. Por fortuna entra. Ya con el 2-0, el partido cambia totalmente para Nacional. Tuvo la pelota y la jerarquía", expresó el volante. Consideró que el rival no les facilitó la tarea, especialmente en el primer tiempo: "Ellos subieron sus líneas, nos metieron atrás y tuvieron para marcarnos . Envigado juega muy bien y tiene la pelota, pero Nacional fue contundente". Para Uribe, después de conseguir el triunfo que convirtió a Nacional el primer equipo asegurado en los ocho, vienen otros retos en la Liga. El interés es seguirla dominando con propiedad, pues aún no conoce la derrota y sus números son casi perfectos. "Para nosotros mantener el invicto va a ser muy importante. Es un objetivo que nos hemos trazado. También hacer la mayor cantidad de puntos posibles y seguir cosechando triunfos", afirmó. Su ausencia pesa Hoy por hoy es uno de los jugadores más importantes para Rueda por su polifuncionalidad y el alto grado de competitividad que muestra en el campo. "Es el trabajo y todas las armas que nos pone a diario el cuerpo técnico. Estaré siempre a la disposición del equipo principal y de este (el alterno). Siempre me entrego al máximo ", comentó. Después de hacer otro juego redondo, como viene sucediendo en cada presentación en la Liga, el mediocampista admitió que le hace falta ese roce internacional que se vio interrumpido por su error en el juego con Barcelona, que le representó la expulsión y cuatro fechas de suspensión que le fueron rebajadas a tres. "Uno en estos momentos siempre quiere jugar, y más en un torneo internacional", sostuvo el paisa, que en el juego con Estudiantes en La Plata pagará la última fecha de sanción. Mateus, que llegó a cuatro goles en la Liga, enfatizó en la confianza que tiene en el grupo que está en Argentina preparando este juego definitivo con el 'Pincha' , pese a que las derrotas con Barcelona (2-1), Chapecoense (2-1) y Botafogo (2-0) hayan ido menguando un poco el poderío de Nacional en el ámbito internacional. "Me siento orgulloso del equipo que nos está representando en la Copa. Este partido va a ser importantísimo para nosotros. Hay que revertir estos resultados que hemos tenido en los torneos internacionales. Los apoyo 100% y les mando toda la energía porque sé que se entregan y trabajan. En un momento esto va a cambiar y vamos a empezar a sumar", enunció el volante.