Chávez: “Fueron días difíciles después de que pateé el penal”

El entonces arquero del Patriotas rememoró el momento en el que ejecutó el cobro con el que América descendió. “No quería cobrarle al equipo del que soy hincha”, dijo a AS Colombia. 

Y luego todo quedó en tinieblas. El 17 de diciembre de 2011 es una de las fechas más agrias para la hinchada americana, el día del descenso, el día en el que se partió la historia del fútbol colombiano. El golpe más deshonroso que han recibido los escarlatas. 

La imagen, cerca de cinco años después aún estremece… Carlos Chávez con el empeine derecho cobro fuerte y venció al arquero Diego Restrepo. Estupor en el Pascual, quizás el silencio más ruidoso en la historia de los rojos. Chávez no celebró, se mostró compungido, ¿en qué me metí? 

América superior pero presionado: “La idea de nosotros era sacar el empate, porque éramos conscientes de que la nómina de nosotros no era igual a la del América. Ellos tenían una presión enorme y nosotros íbamos a aguantar hasta donde pudiéramos”. 

La responsabilidad para Chávez: “Ya le había dicho al entrenador que iba a patear el primer penalti, pero cuando se acabó el partido, el ‘profe’ (Miguel Prince) dijo que yo pateara el quinto, porque a mitad de año ya habíamos quedado campeones contra Cortuluá y yo también había atajado un penalti y marcado el quinto, entonces me dijo que quería que pasara lo mismo. Yo le respondí que no quería patear el penalti que descendiera al equipo del que soy hincha. Él agregó que así es el fútbol y que tenía que patear”. 

El golpe certero: “Cuando nos reunimos antes de los penaltis, le dije a los compañeros que convirtieran todos y que yo iba a tapar alguno. Me tenía mucha confianza y todo se dio. Nuestro compañero botó el cuarto penalti, posteriormente le tocó patear al ‘Tigre’ Castrillo, el tiro pegó en el palo y luego me tocó definir a mí”. 

Las consecuencias por el descenso: “Luego de que anoté el penal, pensé en mi familia. En el estadio estaban mi esposa, mis padres, mi hermana. La gente invadió la cancha y fue cuando interpreté todo lo que iba a pasar. Los días siguientes fueron muy complicados. A los tres días del descenso, yo me casaba y no se pudo hacer la boda donde teníamos definido. Fueron días difíciles después de ese penalti”. 

El acierto del América en el semestre: “América tenía la necesidad de ganarle a todos los equipos. El Presidente acertó contratando al ‘profe’ Torres. Él llegó a poner disciplina en el grupo. Todos saben los inconvenientes que se había tenido con varios jugadores y él llegó a poner orden en la casa. Luego el grupo tomó conciencia de que tenían que lograr el ascenso. Contaron con muy buenos jugadores, en un gran nivel. Borja y ‘el Tecla’ son jugadores demasiado claros, y tuvieron gran solidez en la parte de atrás”. 

Evita ir a ver al equipo de sus amores: “Toda mi familia es americana, pero todavía no me siento cómodo para ir al estadio, el ambiente no es el mejor. Mucha gente no interpreta la posición de uno. Mi familia compró los abonos”.