Hernández dice que desea quedarse “mucho tiempo en el América” y lo sostiene tras mirar atrás y encontrarse con tantas situaciones adversas en su carrera. “Estoy acostumbrado a remar, porque me tocó la fea en varios planteles: En Racing de Montevideo, cuando arreglé mi primer contrato en primera división, jugué seis meses y luego tuve una discusión con el técnico, y no me inscribieron para el siguiente torneo. Me tuve que ir a Deportivo Maldonado (segunda división). Muchas veces pensé en dejar el fútbol, hubo muchos momentos de tristeza, se me cruzaron mil cosas por la cabeza, pero siempre mi familia estuvo en las malas”.