En buena hora Juan Cuadrado deja un Chelsea que se hunde
El extremo colombiano había perdido continuidad y alegría en el fútbol inglés. Ahora vive un momento dulce en la Juventus. Su gol revivió al equipo.
El 31 de enero de 2015 Juan Guillermo Cuadrado se despidió de La Fiorentina como una verdadera estrella. Su destino era la élite del fútbol mundial, nada más y nada menos que el Chelsea de Mourinho. Era un sueño hecho realidad para el antioqueño.
La aventura inglesa no salió como se esperaba. Cuadrado, a pesar de ser campeón de la Premier League y Capital One, tuvo muy poco protagonismo en los 6 meses en Londres. Jugó 15 partidos oficiales y solo fue titular en 4; ningún gol anotado.
El feliz regreso a casa
Después de tantos rumores en el mercado de fichajes Chelsea lo cedió al fútbol italiano para la temporada 2015/2016. Juventus lo acogió, le dio confianza y ahora Cuadrado empieza a devolver esas atenciones con buen fútbol; como lo demostró años atrás en Udinese, Lecce y Fiorentina.
Los resultados en Champions Legue son buenos para Juventus (primero del grupo D con 7 puntos), pero en Serie A la cosas no han sido fáciles. Aunque este sábado Cuadrado mostró la luz que se debe seguir. Con una asistencia y un gol, su equipo venció 2-1 a Torino en el Derby della Mole, un envión anímico para empezar a escalar en las posiciones y buscar el quinto scudetto consecutivo.
Chelsea se hunde en la Premier
Los contrastes entre los dos equipos de Cuadrado son evidentes. La decisión de marcharse a Turín parece haber sido la correcta para Cuadrado.
El actual campeón de Inglaterra está decimoquinto en la Premier Legue con 11 puntos, a 14 unidades del Manchester City y Arsenal, líderes de la competición. El equipo de Mourinho ha perdido 6 de los 11 partidos disputados.
A mitad de semana quedó eliminado de la Capital One a manos del Stoke City y en la Champions League es tercero del grupo G; Porto es el puntero.
“Hoy jugamos una final. Esta victoria fortalece al grupo. Debemos jugar siempre así”, fue el mensaje que dejó Cuadrado tras abandonar el Juventus Stadium después de su gran actuación ante el Torino. Este es un síntoma de su felicidad en Italia.