CORONAVIRUS

Coronavirus: cómo desinfectar ropa y calzado tras volver de la calle

¿Cómo regresan a casa los profesionales de la salud? Conoce los pasos que debes seguir para eliminar el riego de contagio tras salir a la calle.

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Coronavirus: cómo desinfectar ropa y calzado tras volver de la calle

En los últimos días, varios trabajadores de salud han denunciado discriminación en las calles y en los servicios de transporte público, porque algunas personas creen erróneamente que somos más infectantes que la población general. Al contrario: en nuestros lugares de trabajo se nos está haciendo mucho énfasis sobre las medidas seguras para regresar a casa, que son sencillas y protectoras y que cualquier persona puede aplicar utilizando los elementos que todos tenemos en casa. Por eso, hoy les compartimos una ruta limpia que, aunque no seamos médicos, nos permitirá cuidar como verdaderos profesionales a las personas que esperan nuestro regreso.

Ruta limpia en casa

- En la puerta de entrada están listos cuatro elementos: una solución desinfectante, un paño limpio y dos recipientes: uno seco para colocar llaves, cédula, dinero y otros artículos que sacamos a la calle y otro con agua y detergente para la ropa exterior. En el baño se tiene lista una toalla limpia y la ropa y zapatos de cambio.

- Al llegar de la calle, si trae mercado, deje las bolsas de compra en el suelo. Tome uno a uno los elementos de bolsillo y desinféctelos con el paño y la solución que tiene lista para ello, dejándolos en el recipiente seco. Quítese los zapatos y límpielos con agua y jabón: si están húmedos o muy sucios, póngalos de una vez en el balde con agua y jabón. Luego quítese las gafas y la ropa exterior y colóquela en ese mismo balde: no se toque la cara todavía. Vaya en ropa interior y sin zapatos, directo a la ducha. Allí, se va quitando prenda por prenda, jabonándola y poniéndola en otro balde con agua y jabón y luego completa su baño corporal con agua y jabón abundantes. La toalla limpia con la que se seque también irá a la lavadora: a esa, dele sólo un uso.

- Salga del baño, lleve el balde con la ropa interior y la toalla a la lavadora, luego recoja el balde de la entrada con la ropa exterior y esa ropa también póngala en la lavadora, teniendo cuidado con las gafas: límpielas con agua y jabón, séquelas y úselas.

- Por último, tome las bolsas de la compra, desocúpelas sobre una superficie limpia y desinféctelas, o póngalas también en la lavadora si son de tela: lista la carga y, ¡a lavar!

- La compra se lava o desinfecta y se seca, objeto por objeto, antes de ponerla en la alacena o en la nevera. Los zapatos de calle se quedarán en la entrada, pero si están mojados con agua y jabón se lavan en el lavadero, no en la lavadora. Ponga todo a secar con tiempo: en época de lluvias y con espacio limitado en la casa, estas actividades no deben retrasarse.

- Finalmente, conviene tener agua con cloro en un balde con el trapero limpio y listo: se debe trapear todo el camino recorrido y volver a lavar las manos con agua y jabón en el baño con la técnica correcta, dejando limpias las manijas de las puertas con agua y jabón, desinfectante o agua con cloro.

No hagamos mezclas raras: es suficiente usar los productos que tenemos en casa, como siempre lo hemos hecho.

Un llamado especialísimo a cuidar y a no discriminar a nuestros trabajadores de salud. Todos podríamos ser portadores sanos del virus. No somos peligrosos, al contrario: estamos para ayudar y dar ejemplo. ¡Semana de fuerza y amor en casa! Y a los colegas, un abrazo solidario.

Todos, contra el Coronavirus

Siguiendo estas recomendaciones prevenimos la propagación del Coronavirus (COVID-19) en nuestro país: 1. Lávate las manos con frecuencia, 2. No saludes a la gente con besos o apretones de mano, 3. Si toses, cúbrete la boca con el codo flexionado o con un pañuelo desechable, 4. Evita tocarte los ojos, la nariz y la boca, 5. Si tienes fiebre o dificultad para respirar, busca atención médica, pero llama primero a la línea 123, 6. Sigue las indicaciones de las autoridades locales y nacionales.

Y recuerda, ¡quédate en casa!